El oro y el petróleo se desploman por las dudas sobre la economía china
La onza se sitúa baja de los 1.400 dólares China, la Fed y la posible venta de oro por parte de Chipre preocupa a los inversores
Europa y América viven pendientes de lo que pasa en Asia. Si la semana pasada fue la política expansiva de Japón la que explicaba el buen comportamiento de la deuda de los países periféricos de la eurozona, hoy fue el “mal dato” del PIB de China el que ha justificado el batacazo que han sufrido las materias primas.
Claro que ese “mal dato”, en este caso, supone el que la economía china esté creciendo a un ritmo anual del 7,7%, cuando el mercado esperaba un 7,9%. Esta leve corrección ha sido el golpe de gracia para la cotización del oro, que el viernes ya había caído un 5,04% y hoy perdió un 7,10%. En tan solo dos sesiones este metal se ha dejado un 17%, el mayor desplome en 33 años. El petróleo también ha acusado las menores expectativas de crecimiento del gigante asiático y el Brent está cayendo hasta el nivel de los 100 dólares por barril, algo que no se veía desde hacía nueve meses.
“China es el mayor importador mundial de materias primas, por lo que es normal que ante unas perspectivas de menor consumo interno caigan los precios”, explica Daniel Álvarez, analista de XTB. “Ahora bien, la señal de alarma saltó la semana pasada, cuando la Fed reconoció que ya está debatiendo el fin de las medidas de estímulo. Las políticas expansivas de los bancos centrales han sostenido en buena medida el boom de las materias primas y, si se acotan, el oro y otros activos preciosos lo sufrirán”.
El precio del oro al contado ha perdido más de 180 dólares en estas dos sesiones. La semana pasada terminó en 1.482 dólares la onza y hoy cerró en 1.377, lo que le sitúa en mínimos desde febrero de 2011. En lo que va de año, acumula una caída del 17,78%.
Además de la posible retirada de los estímulos por parte de los bancos centrales y los datos macroeconómicos de China, también ha presionado a la baja el anuncio de que Chipre podría vender sus reservas de oro para pagar parte de su plan de rescate. La pequeña isla mediterránea baraja desinvertir 10 toneladas de oro de las 14 que atesora, dado que la Comisión Europea y el FMI le prestan 10.000 millones de euros y el país ha reconocido que necesita 23.000 millones.
El desplome en los mercados de materias primas ha sido generalizado. La plata al contado ha perdido hoy más de un 10% de valor, y acumula en lo que va de 2013 un desplome del 22,77%. También el precio de los cereales o el café han sufrido retrocesos, aunque no tan severos como los registrados en metales preciosos.
Una de las paradojas que pone de relieve el batacazo de ayer es el cambio de paradigma en la consideración del oro como activo refugio. Durante los últimos 10 años, cada noticia económica negativa hacía que aumentara el valor de los metales preciosos, sin embargo, esa carrera imparable podría haber llegado a su fin. “Desde hace un año el oro está a caballo entre el valor refugio y la característica de activo cíclico que tienen el resto de las materias primas”, apunta”, sostiene Soledad Pellón, estratega de IG Markets.
José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España, advierte que “hay muchas recomendaciones de prudencia y cautela”. Sin embargo, estima que se trata de un descenso limitado. “El mercado lo está absorbiendo bien. El año es largo y hay razones que defienden mantener una parte de la cartera en metales preciosos”. Según sus previsiones, el oro no superará los niveles de 1.500-1.700 dólares la onza en la segunda mitad del año.