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Quién manda en las empresas

FCC: estabilidad orgánica y en el capital para seguir creciendo

La estructura corporativa de la compañía está controlada por Esther Koplowitz, que es la accionista de referencia del grupo

En primer plano, Torre Picasso en el paseo de la Castellana de Madrid
En primer plano, Torre Picasso en el paseo de la Castellana de MadridPABLO MONGE

Más de cien años dedicados a la construcción y a los servicios urbanos. Este podría ser el eslogan del grupo FCC, la tercera mayor compañía española de infraestructuras por volumen de ventas. Desarrolló su primera línea ferroviaria en 1909 y en 1911 rubricó su primer contrato de servicios con el Ayuntamiento de Barcelona (limpieza de calles y mantenimiento del alcantarillado). La forma actual de la compañía surge de la fusión en 1992 de Construcciones y Contratas con Fomento de Obras y Construcciones, dando lugar a FCC.

Desde ese mismo momento, la multinacional ha tenido una estructura accionarial basada en el liderazgo de Esther Koplowitz, exceptuando el periodo 1992-1998, en el que esta compartía el mando y el control de la compañía con su hermana Alicia. Ese último año, la segunda le vendió a la primera su participación por la nada desdeñable suma de 136.624 millones de pesetas, dejándola al frente de más de la mitad de las acciones del grupo (en la actualidad controla un 53,82% a través del holding B-1998 y otro 6,8% mediante la sociedad Azate).

La estrategia del grupo pasa este año por seguir con su expansión en el terreno de las energías renovables. Esta pata, junto a la expansión internacional (la panacea del sector desde que estalló la burbuja inmobiliaria) es considerada la clave para aumentar los beneficios, lastrados por la crisis del ladrillo (FCC controla el 70% de Cementos Portland, dedicada a la producción del principal material de construcción) y por la factura que arrastra la Administración (1.700 millones de euros). La política de desinversiones para reducir deuda completa la radiografía del que sigue siendo el principal proveedor de servicios ciudadanos en España.

Una estructura a medida

La consecución de todos esos objetivos es supervisado por un órgano en el que manda la estabilidad. El control de Esther Koplowitz en FCC tiene su correspondiente traducción en la composición del consejo de administración de la compañía. B-1998, la sociedad a través de la que domina la firma, cuenta con 11 de los 18 asientos (19 contando al secretario general) del consejo, incluyendo uno para ella misma, a la sazón vicepresidenta del grupo.

La empresaria cuenta con sus tres hijas en el consejo, todas ellas fruto del primero de sus matrimonios. La primera de sus descendientes en llegar (1999) al consejo de FCC fue Esther Alcocer Koplowitz, actual vicepresidenta segunda de la firma. Un año más tarde se incorporó Alicia y en 2004 lo hizo Carmen. La lista de consejeros dominicales ligados a la sociedad de la familia sigue con Fernando Falcó y Fernández, un hombre con una dilatada carrera en el sector del automóvil y segundo marido de Koplowitz.

También forma parte del equipo Marcelino Oreja Aguirre, el que fuera ministro de Asuntos Exteriores con Adolfo Suárez. Rafael Montes, por su parte, lleva en la casa desde 1967 y cumple este años dos décadas como consejero. Juan Castells entró en el embrión de FCC un año antes que Montes, por lo que ambos conforman el núcleo veterano del equipo de Koplowitz.

Entre los últimos dominicales en sumarse al consejo se cuenta Jaime Llantada, presente también en el consejo de Cementos Portland. Ha presidido el consejo de administración de Industrias Aragonesas del Aluminio y fue el primer ejecutivo de Bankoa (antiguo Banco Industrial de Guipúzcoa). También es el caso de Lourdes Martínez, vinculada a Bodegas Faustino Martínez, entre otras sociedades. Antonio Pérez Colmenero, con un largo pasado en las principales patronales ligadas a la construcción (Aecom, CNC y Ceim) completa la nómina de consejeros nombrados entre 2004 y 2010.

El resto de miembros del consejo de FCC son independientes, exceptuando a Felipe Bernabé García, secretario general y consejero ejecutivo. El más conocido, por sus dos décadas como político de primera fila, es Nicolás Redondo Terreros, el que fuera secretario general del PSE-PSOE.

También forma parte del equipo de consejeros externos Gonzalo Anes, marqués de Castrillón, director de la Real Academia de la Historia desde 1998 y miembro del patronato del Museo del Prado. El know-how sobre el mundo financiero lo aporta César Ortega Gómez, cosecretario y vicepresidente ejecutivo de Banco Santander.

Javier Ribas, por su parte, es doctor ingeniero industrial y ha desarrollado parte de su carrera en Esso y la Compañía Francesa del Petróleo. Si Ribas es el experto en lo tocante al oro negro, Henri Proglio es el máximo entendido en infraestructuras del agua.

Las cifras

11.755 millones de euros es la cifra de negocio que manejó la compañía en el pasado ejercicio, lo que la sitúa como el tercer mayor grupo de construcción del país, por detrás del grupo ACS y de Ferrovial.90.749 trabajadores cuenta la compañía, una extensa plantilla que está concentrada en su gran mayoría en España, donde presta más servicios. Pese a estar principalmente afincados en territorio nacional, la firma está activa en otros 51 países.13,7 millones de euros fue la retribución total del consejo de dirección de la compañía en 2011. De esta suma, 6,7 millones de euros correspondieron al consejo de administración.1.719 kilómetros de autopistas gestiona el grupo FCC en todo el mundo, principalmente a través de su filial Globalvía.5 consejeras tiene FCC, que es la empresa del Ibex 35 con mayor representación femenina en el máximo órgano de dirección. De hecho, las dos vicepresidencias son ostentadas por mujeres.35.237 millones de euros suma la cartera de proyectos que acumula el grupo. Su peso internacional es cada vez más importante.

Baldomero Falcones. El financiero que pasó a la construcción

La experiencia profesional de Baldomero Falcones Jaquotot (Mallorca, 1946) abarca la presidencia y alta dirección de muchas corporaciones, especialmente en el sector financiero. Hijo de cirujano, decidió estudiar Ingeniería de Montes, aunque su pasión por el mundo de la empresa le llevó a matricularse en IESE para cursar un MBA. A partir de ahí, Falcones decide embarcarse en una larga carrera internacional que le lleva a varias empresas.Entre otros, ha sido socio fundador de Magnum Industrial Partners, la mayor firma española de capital riesgo. También ha sido presidente de Mastercard Internacional Worldwide y, con anterioridad, fue director general y miembro de la comisión ejecutiva de Banco Santander Central Hispano, firma que años después le repescaría como presidente de Santander Seguros.Pese a contar con un perfil muy ligado al sector financiero, Falcones acumula experiencia también en el negocio energético, en el que ha sido consejero de Unión Fenosa y director para España de la eléctrica alemana RWE.El ejecutivo le dio otra vuelta a su carrera profesional el 18 de diciembre de 2007, cuando fue nombrado presidente y consejero delegado del grupo FCC. Quién le hubiera dicho al ejecutivo que, más de 30 años después de recibir su título universitario de ingeniero superior, acabaría siendo el timonel de una de las grandes constructoras del país.Tanto es así que desde hace pocos meses Falcones compagina sus funciones ejecutivas con la presidencia de Seopan, la patronal de las multinacionales del sector. La asociación, que tras la marcha de David Taguas contará con una presidencia anual rotativa, representa a un reducido conjunto de compañías que tenían en 2011 una plantilla de más de 400.000 empleados y facturaron 67.000 millones de euros, el equivalente al 6,3% del PIB).También es, entre otros cargos, miembro del consejo económico de la Fundación Albéniz.

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