El castigo contra la banca hace caer al Ibex un 1,44%
El día después de la rebaja de Moody's los inversores se ceban con las entidades domésticas, que caen más de un 4%.
Los mercados no perdonan. El Gobierno sigue vendiendo la idea de que la ayuda financiera de hasta 100.000 millones es para tener un colchón amplio de capital. Pero los inversores recelan del sector financiero español. Por las mesas de negociación circuló ayer el rumor de que España sufrirá una rebaja inminente del rating soberano, lo que la situaría en el terreno especulativo. Esto bastó para llevar la prima de riesgo de vuelta a los 530 puntos y hacer que el selectivo fuera el índice más penalizado de Europa, con una caída del 1,44%. Al Ibex tampoco le ayudó en nada la subasta de letras del Tesoro, en la que el ente tuvo que subir los tipos marginales del 2,5% y del 3,369% para colocar papel a tres y seis meses.
Los valores más castigados fueron los del sector financiero, los más sensibles a la prima de riesgo. Bankia retrocedió un 8,6%; Popular, un 7,09%; CaixaBank, un 5,56%; Sabadell, un 5,32% y Bankinter, un 4,35%. Los dos grandes saldaron el día con pérdidas más moderadas. BBVA se dejó un 1,7% y Santander, un 1,46%. Inditex, el mayor valor del selectivo, aguantó el tirón y subió un 0,57%. Telefónica, la segunda compañía del índice, retrocedió un 0,89%. El castigo a los bancos ha puesto al Ibex en 6.528,4 puntos, regresando así a los mínimos de hace una semana.
En cualquier caso, el varapalo al Ibex se hizo con muy poco volumen de negociación. El neto del continuo, excluidas operaciones fuera de mercado, se situó en 1.317 millones de euros, una cifra extraordinariamente baja.
En Europa, el Dax logró cerrar al alza por la mínima con un avance del 0,07%, justo lo mismo que cayó Londres, mientras que el Euro Stoxx cedió un 0,13%; París, un 0,3% y Milán, un 1,11%.
El mercado contiene el aliento ante la cumbre europea de finales de semana y en la que estaban puestas las expectativas del mercado. A medida que avanza la semana estas expectativas se van rebajando. "Las expectativas de la eurocumbre del 28-29 de junio se están rebajando", confirma Pablo García, de Carax Alpha Value.
Los ministros de Finanzas de Francia, Alemania, Italia y España se reunieron ayer en París junto al comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, para preparar el encuentro.
Pero el primer ministro italiano, Mario Monti, ya ha avisado de que las negociaciones van a ser "difíciles". El mercado es un hervidero de rumores. El propio Monti tuvo que desmentir que haya amenazado con dimitir si la canciller alemana, Angela Merkel, no retira su negativa la proyecto de los eurobonos.