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Dcoop, principal exportador de aceite a EE UU: “Estamos hartos de ser los paganos de los acuerdos comerciales”

Productores, fabricantes y cooperativas reclaman un plan de choque a Bruselas

Proceso de cribado de la oliva en una cooperativa de Jaén.
Ginés Donaire

Uno de cada tres litros de aceite de oliva que importa el mercado norteamericano tiene origen español. El valor de esas exportaciones superó en la campaña 2023-2024 los 1.000 millones de euros. Cifras que evidencian la hegemonía del oro líquido español y, a la vez, la preocupación que se ha instalado entre productores y envasadores ante el escenario arancelario, que tendrá impacto en toda la cadena alimentaria y provocará la pérdida de consumidores.

Estados Unidos consume cerca de 400.000 toneladas anuales de aceite de oliva y solo produce unas 10.000, por lo que el 98% de sus necesidades son cubiertas por la importación. Los industriales españoles creen que estos aranceles se traducirán en un encarecimiento del precio de compra que deberá ser asumido por el consumidor estadounidense. “Las diferencias arancelarias entre mercados fomentan un mayor impacto y una pérdida de competitividad de nuestro país frente a otros países exportadores que no se verán afectados por la medida”, sostienen desde Asoliva.

La cooperativa andaluza Dcoop, principal exportador de aceite de oliva virgen a Estados Unidos, vaticina que estos aranceles van a suponer un encarecimiento de los productos agroalimentarios, que acabarán trasladándose a los clientes y, en última instancia, al consumo. “Esperamos que ese incremento del precio suponga la menor caída posible, partiendo de los actuales niveles bajos del aceite”, indican desde la cooperativa, que pide a la Unión Europea responder a esta nueva situación de forma contundente. “Estamos ya hartos de que el sector agroalimentario sea el pagano de los acuerdos comerciales donde se prima el interés de otros, como el siderúrgico o el automovilístico”, apuntan desde Dcoop. Esta exporta por valor de más de 200 millones de euros anuales de media a Estados Unidos, mayoritariamente aceite y algo de vino y aceituna de mesa.

Sin embargo, las cooperativas dibujan un escenario más halagüeño al de 2019, cuando se gravó con un arancel del 25% motivado por el conflicto aeronáutico Airbus-Boeing. Peores augurios vislumbran los productores de aceituna negra española, que lleva siete años consecutivos sufriendo un arancel del 31,5% con carácter general al que ahora unirán otro 20%. Desde Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía están a la espera de conocer la letra pequeña del tratado firmado por Donald Trump y que podría entrar en vigor el 9 de abril. No obstante, prefieren ver el vaso medio lleno y no medio vacío.

“El hecho de que el arancel se aplique a todos los productores de la Unión Europea (UE) sin distinción de origen, dibuja un escenario a priori más positivo que el que las cooperativas oleícolas vivieron en el año 2019, cuando se gravó con un 25% la exportación a Estados Unidos de aceite de oliva envasado de origen español, en aquella ocasión, motivados por el conflicto aeronáutico Airbus-Boeing”, expone el presidente sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias, Cristóbal Gallego.

En esta ocasión, al afectar a todos los países por igual dentro del marco comunitario (España, Italia, Portugal y Grecia), el sector entiende que se perderá mercado, pero no se perderá competitividad respecto a estos competidores directos. “Salvo Turquía, al que se le ha impuesto un arancel del 10%, el resto de productores oleícolas vamos a jugar con las mismas reglas”, indica Gallego.

Mercado estratégico

No obstante, Cooperativas Agro-alimentarias lamentan estos nuevos aranceles ya que EEUU es un mercado estratégico para el aceite de oliva español “y en donde veníamos creciendo considerablemente, fruto del esfuerzo y el trabajo realizado por las cooperativas oleícolas desde hace décadas”.

En los últimos seis años, España, Italia, Túnez y Turquía han sido los principales proveedores de aceite de oliva a EEUU, representando en conjunto el 86% del total importado. En la campaña 2023-2024, uno de cada tres litros de aceite de oliva que importa el mercado norteamericano tiene origen español. El valor de esas exportaciones superó los mil millones de euros por primera vez, creciendo un 82% frente a la campaña precedente, debido también a las subidas de los precios.

Tras Italia, EE UU es hoy día el principal destino de las exportaciones del aceite de oliva de origen nacional. Por esta razón, el sector lamenta que la imposición del arancel de un 20% al aceite español que entre en Estados Unidos va a suponer “un encarecimiento de un producto que está avalado científicamente como saludable para el consumo”, por lo que, con esta medida, “se está perjudicando también a los consumidores estadounidenses”, recalca Cristóbal Gallego.

Aceituna de mesa

Para el sector de la aceituna de mesa, las perspectivas son poco halagüeñas. La aceituna negra española lleva siete años consecutivos sufriendo un arancel del 31,5% con carácter general a su entrada en Estados Unidos, por medidas compensatorias antidumping, derivado de la denuncia que hicieron en 2018 empresas aceituneras norteamericanas. “Si se le aplica ahora un arancel añadido del 20% a la aceituna negra, y otro 20% a la aceituna verde, para las cooperativas aceituneras será prácticamente imposible comercializar su producto en Estados Unidos, especialmente en lo que a aceituna negra se refiere”, apunta Gallego.

La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha fallado en varias ocasiones a favor de la Unión Europea declarando los aranceles a la aceituna negra española como ilegales. Sin embargo, Estados Unidos continúa aplicándolos, causando 13 millones de euros en gastos legales, la pérdida del 70% de clientes en Estados Unidos y más de 200 millones de euros de pérdidas económicas por la drástica caída de las exportaciones, exponen desde Cooperativas Agro-alimentarias.

Tampoco son buenas noticias para la aceituna verde, pues su exportación a EEUU ya estuvo grabada con un impuesto del 25% por la disputa comercial entre Boeing y Airbus, arancel que se paralizó en 2021 por un periodo de cinco años. “Esta nueva tasa supondrá, irremediablemente, una nueva caída de la cuota de mercado”, auguran desde Cooperativas.

El presidente sectorial de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Gabriel Cabello, califica esta situación como un nuevo varapalo comercial para la aceituna de mesa, cuyas exportaciones en 2024 cayeron un 42% respecto a 2017 (último año sin aranceles) en lo que a las negras se refiere. En cuanto a las verdes, las exportaciones han descendido un 49% respecto a 2019.

“Este arancel supone un craso error, ya que el mercado norteamericano necesita importar aceitunas de España para cubrir su demanda de consumo”, señala Gabriel Cabello, que indica que “EE UU sigue siendo el principal importador de aceituna de mesa española, por valor de casi 194 millones de euros en 2024″.

Ante esta situación, el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Fulgencio Torres Moral, exige una “respuesta contundente” que palien los daños ocasionados por la guerra arancelaria. “Andalucía es una potencia agroalimentaria mundial, pero ese liderazgo se perderá si no cesan de ponernos barreras comerciales”, subraya Fulgencio Torres, que lamenta que “todo el esfuerzo y recursos invertidos en valorizar nuestras producciones a nivel internacional se vayan al traste por conflictos geopolíticos”.

Sobre la firma

Ginés Donaire
Corresponsal de El PAIS en Jaén desde septiembre de 1999. También soy colaborador de la Agencia Efe y, desde 2021, responsable del medio digital 'Alma de Pueblos' sobre el Reto Demográfico y el medio rural. Especializado en la información agraria. Asociado del Colegio de Periodistas de Andalucía. Graduado en Derecho por la UNED.
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