Alegría en el parqué: El Ibex descuenta el rescate de la banca y vive su mejor semana del año

Lejos de generar temor e incertidumbre entre los inversores, el posible rescate bancario español supone un soplo de aire fresco para un mercado que no recibe más que palos desde hace semanas.

La Bolsa está a punto de cerrar su mejor semana del año e incluso la más alcista desde diciembre cuando el BCE puso en marcha su primera ronda de LTRO. En las últimas cinco sesiones, el selectivo Ibex sube alrededor de un 5% y todo gracias a que el mercado está descontando el rescate inminente de la banca.

Lejos de generar más incertidumbre, los rumores de que España podría pedir el rescate de sus bancos este mismo fin de semana animan a la Bolsa española y moderan la prima de riesgo que lleva toda la semana recibiendo con subidas las noticias sobre la mayor flexibilidad mostrada en sus posturas por Berlín y el Banco Central Europeo (BCE).

Los expertos de Link Securities creen que el informe publicado ayer por la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's sobre este tema ha eliminado incertidumbre. "La aportación de capital que el Gobierno español o la Unión Europea tendrían probablemente que suministrar a los bancos españoles sería razonable y se concentraría en un número limitado de instituciones", explica S&P.

Por su parte, Jesus Muela, subdirector general de GVC Gaesco Valores cree que "desde mi punto de vista lo que el mercado esta descontando es que el dinero necesario para recapitalizar la banca no va a venir del gasto público".

En concreto, está en proceso un acuerdo que permitiría a España recapitalizar la banca con ayuda de Europa. La certeza de que España logrará el acuerdo europeo para sanear su sector financiero ha tenido un efecto inmediato en el mercado a lo largo de la semana.

Javier Barrio, de BPI, valora positivamente el hecho de que la ayuda para la banca española no va a llegar como un rescate al uso sino vía ayudas a las entidades que estén en problemas. Para Juan José Fdez-Figares Director de Análisis Link Securities, el problema de la banca española está acotado a una serie de entidades, principalmente a tres bancos creados por cajas de ahorros -Bankia, CatalunyaCaixa y Novagalicia Banco-. "Desde la firma de análisis señalan que gran parte de las necesidades de capital de los bancos españoles se podrán cubrir con la generación orgánica de las propias entidades y con la venta de activos, proceso en el que están embarcados casi todos los bancos cotizados".

Baile de cifras

Una de las grandes incógnitas que rodean al saneamiento del sector bancario español es la cifra definitiva que se necesitará inyectar. A la espera de que manera oficial el FMI emita su informe el próximo lunes, las filtraciones y las estimaciones de organismos y políticos abarcan una horquilla muy amplia.

El informe del Fondo Monetario Internacional, que según diversas fuentes incluiría el segundo Real Decreto de aumento de provisiones aprobado por el Gobierno en mayo, determinará que las necesidades totales del sistema bancario rondarán los 90.000 millones de euros, de los que 50.000 podrían ser perfectamente cubiertos por los recursos de las entidades.

"El déficit de capital final de la banca española se situaría en torno a los 40.000 millones de euros después de contar con la capacidad que tienen algunas entidades para afrontar las pérdidas esperadas con sus recursos propios", explicó una de las fuentes.

Mientras que el FT publicada esta semana que la Unión Europea está sopesando un programa de rescate para España que supondría ayudar a su frágil sector bancario a la vez que impondría solo "una condicionalidad muy limitada" sobre el Gobierno. Así, el Gobierno central estaría dispuesto a aceptar el rescate. A pesar de que banqueros destacados como Emilio Botín han cifrado estas ayudas en unos 40.000 millones de euros, los altos funcionarios de la CE cuentan con que este monto no baje de los 80.000 millones. Habrá que esperar, en todo caso, hasta que no se publiquen los resultados de las auditorías que están elaborando las empresas Roland Berger y Oliver Wyman.