Una respuesta a los retos de los gestores públicos

La necesidad de introducir cambios en la gestión de la Administración pública parece ser el mantra que nos pone a todos de acuerdo -en mayor o menor medida- desde hace algunos meses. El tema de la reforma de las Administraciones no es, ni mucho menos, nuevo, pero parece que sí lo es la urgencia. Y qué mejor momento que una crisis de estas proporciones, que no hace viable la estrategia de la huida hacia delante (cortoplacismo ideológico) o la del avestruz (no quiero ni ver lo que ocurre). Así que parece que esta vez va en serio.

Desde el Center for Public Leadership and Government del IESE hemos comenzado la tarea de analizar la información disponible y mirar fuera de nuestras fronteras, donde podemos encontrar prácticas muy interesantes que mejoran la eficiencia de la gestión pública. La actividad principal del centro, la formación, nos ha permitido a lo largo de los últimos años estar en contacto con un nutrido grupo de directivos públicos, que nos han trasladado sus inquietudes, perspectivas y análisis de la situación.

Todo ello avala la propuesta de tres ejes fundamentales en torno a los cuales organizar esta modernización de la gestión pública: estrategia, evaluación y equipo. Son los tres grandes retos a los que se enfrenta la Administración pública española y los avances hacia su logro son imprescindibles y urgentes. Por ello, la actividad del centro se ha diseñado para trabajar en tales líneas.

Respecto a la estrategia, no cabe la menor duda de esa gran organización que es España SA, con sus más de 3 millones de empleados y sus 47 millones de accionistas, necesita un plan estratégico que aglutine y dé coherencia a las diferentes políticas públicas.

La planificación estratégica permite dirigir cualquier organización mirando al futuro, de manera que cada paso tiene sentido en función de los objetivos prefijados. El programa de Estrategia en la Gestión Pública se orienta precisamente a ofrecer a los participantes las claves para el análisis, la definición y la implantación de la estrategia en la gestión pública.

El segundo eje mencionado es la evaluación de políticas públicas, el complemento necesario de la estrategia. Objetivos, indicadores y sendas han de ser definidos en términos que permitan medir su avance (o retroceso) a través de una evaluación permanente. Los resultados de los diferentes tipos de evaluación (a priori, correlativa, de resultados, etcétera) deben ser utilizados como fuente de información en la toma de decisiones.

Hablemos, por ejemplo, de los tan traídos y tan llevados recortes. Parece evidente que la primera cuestión a determinar es qué políticas funcionan, cuáles funcionan relativamente y cuáles no funcionan en absoluto. Sin este criterio tan básico, estaremos abocados a recortar de forma arbitraria y cortoplacista.

Y para poder determinar el grado de validez de las políticas, necesitaremos disponer de los datos de su evaluación. El centro ofrece por tercer año un programa especializado, el programa de Evaluación de Políticas Públicas, liderado por el profesor Dan Levy, experto de la Harvard Kennedy School of Government.

El equipo humano necesario para realizar los posibles cambios y transformaciones es un elemento clave en la actividad del centro. Los directivos públicos y líderes políticos pueden y deben asumir su papel como motores de esta transformación. Y para lograr su objetivo necesitan formación. El programa de Liderazgo para la Gestión Pública ha buscado en sus ocho ediciones para más de 600 líderes precisamente desarrollar la capacidad de liderazgo de estos directivos, dotándoles de los instrumentos necesarios para impulsar la eficiencia en la gestión.

La vocación internacional del IESE y del propio centro encuentra su lugar en otro interesante programa, Driving Government Performance, liderado por el profesor Robert Behn, de la Harvard Kennedy School. Otro programa internacional es el de Dirección de Campañas Electorales, dirigido por el profesor de Harvard Steven Jarding, de quien alguien dijo que es "un director de campaña que gana las elecciones que se dan por perdidas". Los programas internacionales responden a la misión del centro que pretende aportar la experiencia de 50 años del IESE al servicio de la Administración pública para convertirse en un referente internacional en la formación de directivos públicos.

Una gran diversidad de programas es la mejor muestra de este empeño por facilitar al sector público la tarea de crear equipos directivos eficientes, formados y motivados para liderar el cambio en esta gran organización que llamamos España SA.

Antonio Núñez. Director ejecutivo de Center for Public Leadership and Government (IESE)