El precio del petróleo empieza a afectar a la demanda, advierte el CGES
La subida del precio del petróleo en los mercados está empezando a afectar a la demanda, pese a que los países productores reiteren que el suministro está garantizado y que este aumento no refleja la realidad de la oferta y la demanda.
Así lo advierte el Centro de Estudios Globales de la Energía (CGES) en su previsión mensual publicada hoy en Londres, en la que descarta un elemento especulativo y subraya la similitud de la situación actual con la de principios de 2008, cuando la espiral alcista terminó en julio con el máximo histórico del crudo, que quedó en 147,5 dólares por barril.
"Las similitudes con el mismo periodo de 2008 son preocupantes", afirma el informe, que argumenta que los precios actuales reflejan el agotamiento del mercado, en una tendencia que se ha ido acrecentando desde mediados del año 2010.
El CGES considera que los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no han reemplazado todo el crudo perdido a causa del conflicto en Libia, por lo que en el mercado hay un millón menos de barriles diarios que hace un mes.
"Si la OPEP no incrementa el suministro para equilibrar el mercado, la demanda tendrá que reducirse eventualmente, algo que sólo se conseguirá con una repetición de los precios récord de 2008", dice el CGES, que descarta que haya un elemento especulador.
"Pese a las declaraciones de los ministros de Energía de los países productores y consumidores de petróleo, así como de algunos bancos de inversión, de que los precios han subido por la especulación, el CGES no considera que este sea el caso", afirma.
Este centro de estudios admite que puede haber habido posiciones especulativas a largo plazo, pero señala que su Índice de Intensidad Especulativa, que mide el volumen de actividad especulativa pura, está en sus niveles más bajos desde principios de 2007.
El informe señala además que la situación de suministro era ajustada incluso antes de que estallara la crisis en Libia.
Los inventarios de crudo han mostrado una tendencia bajista desde finales del primer trimestre de 2010, hasta una tasa de más de 1,4 millones de barriles al día durante la segunda mitad del año.
A principios del segundo trimestre de 2011, había reservas de crudo en el mundo para los próximos 70 días, un nivel que se vio por última vez en las mismas fechas de 2008.
El CGES da por hecho que los países de la OPEP no van a hacer nada y recuerda que hace meses los responsables del cartel hablaban de un "precio razonable" cuando se llegara a los 100 dólares por barril y que ahora ese "precio razonable" son los 120 dólares.
En este sentido, critica la facilidad con la que los Gobiernos de los países consumidores han aceptado en los últimos meses que hay un movimiento especulador detrás de esta subida, "quizás asesorados por compañías petrolíferas y bancos que logran grandes beneficios gracias a los elevados precios del petróleo".
El informe termina con la conclusión de que "la demanda de crudo no puede seguir creciendo sin el suministro que la satisfaga".
"Si la OPEP no incrementa su producción, el crecimiento en la demanda caerá y esto solo se conseguirá con unos precios lo suficientemente altos como para empezar a destruir la demanda. Aunque los factores fundamentales de este proceso difieran de los de 2008, su resultado neto puede ser igual de terrible", explica.