La línea del AVE más rentable une Madrid y Valencia
En un mes Renfe ha vendido más de 75.000 billetes para las nuevas líneas de alta velocidad con el Mediterráneo.
Una hora y media. Ese es el tiempo y la clave de la rentabilidad del nuevo tren de alta velocidad que este sábado se inaugura oficialmente y que desde el domingo enlaza Madrid y Valencia, con parada en Cuenca y Utiel-Requena en alguno de los trayectos, convirtiéndose en la primera línea AVE que será rentable para Renfe, según aseguran desde la operadora. Una hora y media es menos de la mitad de lo que tardaba ahora el Alaris, la marca comercial con la que se opera ese trayecto por parte de Renfe, en unir las dos ciudades. De hecho costaba casi tres horas y media. Demasiado tiempo para los casi 400 kilómetros que separan las dos ciudades en línea ferroviaria. Demasiado para ser alternativa al avión para los viajes de negocios con vuelta en el día.
Pero con la nueva vía, que ha supuesto una inversión de 12.500 millones de euros, y los nuevos trenes, ese tiempo se reduce hasta el punto de que el avión verá reducida su cuota de mercado de forma drástica en beneficio del ferrocarril. Es la gran infraestructura del año para el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, una demanda reiterada de la Comunidad Valenciana, que Francisco Camps también quiere rentabilizar políticamente, y un empeño del actual ministro de Fomento, José Blanco, que destaca el importante impacto que tendrá el nuevo AVE en la economía valenciana y, naturalmente, también en la de Madrid. No en vano, la capital de España sigue beneficiándose del sistema radial que le ha permitido consolidarse como el nexo ferroviario de alta velocidad más importante del mundo.
La demanda que tiene este nuevo trazado se ha demostrado en el primer mes en que se han puesto a la venta los billetes: 75.000 pasajes, mayoritariamente con destino a Valencia, aunque también para Cuenca y para Albacete el primer tramo del nuevo ramal que en el futuro unirá Madrid con Alicante pero que ya enlaza la capital manchega en las mismas condiciones que Sevilla, Valladolid o Barcelona. Un dato que no es anecdótico, a pesar de que las ventas corresponden mayoritariamente al periodo vacacional de Navidad y ese, en la mayor parte del año, no será el pasaje habitual del pato de Talgo-Bombardier.
Y es que el objetivo de Renfe, como operadora, es captar al viajero de negocios que actualmente opta por el avión. Según el estudio de impacto económico de la línea Madrid Valencia del Ministerio de Fomento, el AVE sustituirá un 25% de los viajes en coche, un 55% de los viajes en avión y un 5% de los viajes en autobús. Esto supone que, de una cuota de mercado entre las dos capitales del 10% actual, el tren pasará al 41,3%. El avión, pasará del 13% al 5,2% del total de viajeros, y el coche, del 72% al 48%. En el primer año de la puesta en marcha de la línea, el AVE será utilizado por 3,6 millones de pasajeros, de los cuales, 800.000 serán nuevos viajeros, según el informe.
Este aumento de la demanda del tren llegará pese al incremento del precio sobre el actual del Alaris. En el Madrid-Valencia, el precio normal del billete de ida en clase turista será de 79,8 euros. En la nueva clase business que estrenará la compañía con estos servicios el precio asciende hasta 143,7 euros. Estas tarifas, similares en euro por kilómetro al resto de líneas AVE, suponen un notable incremento sobre el precio del tren que ya dejará de circular este sábado, el Alaris, que costaba 47,50 euros en clase turista.
La clave para darle la vuelta a la tarta de la cuota de mercado está en las horas punta, es decir, en aquellas en las que se acumulan los viajeros de negocios a los que les importa menos el precio que el tiempo de viaje. Es cierto que en avión se puede viajar mucho más económico, pero no en las horas clave para el público de negocios. Ir a Madrid a las ocho de la mañana, por ejemplo, puede llegar a costar 300 euros. Pese a que el avión tarda ligeramente menos, unos 40 minutos de vuelo más el tiempo de espera en las terminales, la comodidad del tren y el dejar al pasajero en el centro de las dos grandes capitales es un elemento esencial en la oferta que este fin de semana se pone en marcha.
Trenes
El Talgo-Bombardier S-112 será el encargado de realizar los trayectos entre Madrid y Valencia y entre Madrid y Albacete. Este nuevo tren puede superar los 300 kilómetros por hora. Renfe ha apostado por un confort interior de gama alta en la clase business para competir con el avión. El tren se ha popularizado como el 'pato'.Renfe utilizará los trenes de alta velocidad S-130 fabricados por Talgo y Bombardier para realizar los trayectos mixtos, es decir, aquellos que circulan en parte por las plataformas del AVE y que después, con destino a Alicante o Castellón, deben usar la vía tradicional. Este modelo permite cambiar de ancho internacional al español.
Las estaciones
ALBACETE. La nueva estación de Albacete se encuentra en el mismo complejo que la antigua. La iniciativa de su construcción ha supuesto para Adif una inversión de 48 millones de euros. Está situada justo en el borde del casco urbano y la nueva terminal quintuplicará en espacio a las antiguas. Ofrecerá 619 plazas de aparcamiento y en su vestíbulo se instalará un gran centro comercial.CUENCA. La nueva conexión ferroviaria de alta velocidad incorpora a la red española a Cuenca, una ciudad con unas pésimas comunicaciones por tren hasta la fecha y que, con la puesta en marcha del AVE a Valencia, verá reforzada su posición tanto en el sector de los negocios como en el del turismo, ya que queda en un punto equidistante entre las dos grandes urbes que ahora se unen.VALENCIA. Adif ha optado en Valencia por construir una nueva estación, de carácter provisional hasta que en un futuro por vislumbrar se entierren las vías. La estación Joaquim Sorolla está en el mismo recinto que la histórica Estació del Nord, pero no están conectadas por el interior. æpermil;sta será el origen y destino tanto de los AVE a Madrid como de los Euromed con destino a Barcelona y Alicante.MADRID. La estación de trenes de alta velocidad de Puerta de Atocha ha tenido que ser remozada y ampliada para acoger el incremento de tráfico y pasajeros que traerá aparejada la puesta en marcha del AVE a Valencia y Albacete. Tras un periodo en que la salida de los trenes al mediterráneo salían de Chamartín con una parada en las vías de cercanía de Atocha, ahora ya tienen un espacio propio.
La clase 'business' llega al tren
Los viajeros con billete business, la nueva clase preferente de Renfe, tendrán derecho a estacionamiento gratuito de su coche en los parkings de las estaciones por 24 o 48 horas, según el trayecto. También se mejora el control de acceso, incorporando medios técnicos informatizados y el chequeo de los billetes mediante PDA.En el servicio abordo, Renfe quiere alcanzar la personalización adaptándose a cada viajero. La estandarización de este proceso se hace en cuatro partes: acogida de los viajeros, entretenimiento a bordo, restauración y servicio de cafetería y despedida de viajeros. Uno de los aspectos clave será la existencia de señal wifi en todo el trayecto.Las salas para los viajeros de primera clase dispondrán de cómodos asientos, mobiliario moderno y funcional, climatización, prensa y revistas, televisión, aseos, teléfono, wifi, fax y autoservicio de cafetería y se ubicarán en las estaciones de Alicante, Albacete, Madrid Chamartín, Madrid Puerta de Atocha (con dos salas) y Valencia.