"Windows Phone 7 permitirá al móvil engancharse a la nube"
John Mangelaars, vicepresidente de Microsoft, defiende el nuevo sistema
Microsoft está dispuesto a recuperar el terreno perdido en el mundo de la telefonía móvil con su nuevo Windows Phone 7, que llegará al mercado el lunes que viene, y hacer frente a rivales como Apple, Google, Nokia o RIM. "La estrategia va bien", señalan John Mangelaars, vicepresidente de la división de Consumo & Online del gigante estadounidense en la zona de Europa, Oriente Medio y África (EMEA).
En una entrevista con CincoDías, el directivo explica que el móvil es uno de los pilares de la estrategia de la empresa para permitir a los usuarios el acceso a la información que está incluida en la nube, de la misma manera en la que pueden acceder a través del ordenador personal o el televisor. "El PC y el teléfono estarán conectados a la nube para que el cliente pueda acceder a todos los datos o usar cualquier aplicación desde cualquier sitio", indica Mangelaars, que pone ejemplos como la posibilidad de usar el Messenger o ver fotos que estén guardadas en un servidor desde el móvil, el PC o la televisión. "Estamos moviendo todo hacia la nube", señala.
El ejecutivo afirma que los consumidores quieren conectividad fácil y acceder a las aplicaciones con la mayor velocidad posible. Mangelaars destaca que el nuevo Windows Phone 7 cubre esos requerimientos porque es fácil de utilizar, permite el acceso rápido a los datos que están en la nube y ofrece un nuevo interfaz de usuario, que facilita el acceso a esos contenidos.
Mangelaars pone el ejemplo de la plataforma de juegos Xbox Live (donde la empresa cuenta con 24 millones de clientes en todo el mundo), a la que se podrá acceder desde los móviles con el sistema operativo de Microsoft, los PC y la televisión. "El usuario podrá estar jugando en casa con la consola y seguir con el mismo juego en el móvil si sale a la calle", señala Mangelaars, quien reitera que la compañía quiere hacer una gran oferta en el móvil con Windows Phone 7, en el PC con Windows 7, en el televisor y en todas las categorías de dispositivos.
Ante la cuestión sobre la progresiva pérdida de cuota de mercado que Microsoft ha tenido en el mundo del móvil ante Apple y Google y su capacidad para recuperarla, Mangelaars defiende la fortaleza de su compañía en el desarrollo de productos. El ejecutivo cree que la empresa de la manzana mantiene una estrategia vertical que le lleva a controlar todas las ramas del negocio. Con respecto a Google, indica que está haciendo un gran trabajo en las búsquedas pero en otras áreas está aplicando una estrategia no muy clara, y parece que "no está completada o conectada". "La estrategia de Apple es más clara", afirma.
Desarrollo de productos
El responsable señala que Microsoft siempre analiza el producto y pone el ejemplo de Windows 7, donde ha vendido en un año más de 150 millones de licencias en todo el mundo, o de Kinect, la nueva tecnología que permite jugar con la consola Xbox 360 sin usar mandos, que va a llegar al mercado en unas semanas. "Hemos hecho un buen trabajo en estas áreas y lo haremos en el móvil".
Mangelaars, que destaca la colaboración de los partners en el desarrollo del nuevo Windows Phone 7, explica que su empresa va a tener una amplia presencia en el ámbito de las aplicaciones. "Todas las plataformas de móviles van a tener sus propias ofertas de aplicaciones", explica el ejecutivo, quien destaca la importancia que va a tener su adaptación a cada mercado. Además, señala que Microsoft está adaptando aplicaciones al mercado español. Asimismo, apunta que las aplicaciones de Microsoft, los juegos entre ellas, estarán disponibles para todas las plataformas.
Además, en estas actividades hay más fuentes de ingresos. Mangelaars pone el ejemplo de los ingresos que capta Microsoft Advertising a través de los anuncios incluidos en los juegos. La publicidad se inserta, por ejemplo, en las vallas publicitarias en videojuegos de fútbol o carreras de coches o motos. Esos anuncios, dice, no son fijos sino que cambian para dar entrada a nuevos anunciantes.
Con respecto a la implantación de Windows 7 y a la migración desde otras versiones del sistema operativo, Mangelaars cree que el proceso ha sido positivo. "Estamos viendo una aceleración de la migración", señala Mangelaars, quien cree que permite a las empresas recortar gastos a la vez que mejora la productividad de los trabajadores, que pueden usar programas como el Word tanto desde el móvil como desde el PC.
"Bing se ha convertido en un buen buscador"
Dentro del mundo de las búsquedas, John Mangelaars destaca la evolución que ha tenido Bing, el buscador de Microsoft, en el mercado de EE UU. "Google es muy fuerte, pero el mercado estadounidense es muy grande y Bing se ha convertido en buen buscador", afirma el directivo, quien indica que en otros mercados como España, por el contrario, Google tiene una posición de dominio casi total.En este sentido, el ejecutivo defiende la alianza entre Microsoft y Yahoo en el ámbito de las búsquedas online. "Es un jugador muy relevante que irá creciendo en el futuro", explica Mangelaars. Además, el directivo señala que Microsoft y Yahoo han entrado juntos primero en Reino Unido y posteriormente extenderán su presencia en otros mercados europeos. Aunque el ejecutivo cree que va a cambiar la forma de buscar en internet y cobrarán relevancia áreas como las redes sociales.Con respecto a la actual situación de crisis económica en Europa y España, Mangelaars cree que es una buena oportunidad para su empresa. "Microsoft está enfocado en el principio de más valor por menos coste. Es lo que quieren los consumidores", explica el directivo, quien advierte que es un momento interesante porque se está trabajando con los consumidores para alcanzar el reto de conseguir más valor.El ejecutivo señala que Microsoft compite por el tiempo del consumidor, por los juegos o libros que compra, por los billetes o reservas que hace. Y precisa que, dentro de su estrategia, Microsoft está aprendiendo a competir por atraer al consumidor.Mangelaars también opina que los consumidores han cambiado. Y justifica su visión en dos motivos. Por un lado, afirma que ya no compran tecnología, "compran emociones, no les importan las cuestiones técnicas". Por otro, el directivo de Microsoft explica que, como la economía está en un mal momento, los usuarios son más conscientes de lo que compran y lo que gastan.