Obama y Cameron instan al G20 a pactar una política fiscal para impulsar el crecimiento
El primer ministro de Reino Unido, David Cameron, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, mantuvieron este martes una conversación telefónica en la que se comprometieron a trabajar por la consolidación fiscal durante la cumbre del G20 que se celebra el próximo fin de semana en Toronto, ciudad canadiense en la que mantendrán su primera reunión bilateral este sábado.
Ambos dirigentes coincidieron en la necesidad de que el G20 alcance un consenso que permita la implementación de una política fiscal con la que apuntalar el crecimiento económico, informó un portavoz del 'premier' británico.
La Casa Blanca señaló en un comunicado que, coincidiendo con la cumbre de las 20 principales economías del mundo, ambos dirigentes mantendrán su primera reunión desde que Cameron asumiera el cargo. El encuentro también será el primero desde la crisis medioambiental causada por la petrolera británica BP en el golfo de México, un incidente que ha provocado tensiones entre Washington y Londres.
En su conversación telefónica, Obama y Cameron "coincidieron en que la cumbre del G20 será una oportunidad vital para poner los cimientos de la recuperación global a través de la consolidación de una política fiscal equilibrada y de nuevas estrategias de crecimiento", señaló el portavoz de Cameron.
A pesar de que Obama ha alertado del peligro de retirar el estímulo económico demasiado pronto, el Gobierno de Reino Unido reveló este martes un ambicioso plan que establece el aumento de impuestos y diversos recortes en el gasto público para reducir el histórico déficit presupuestario actual británico a tan solo el 1% del PIB en cinco años.
El ministro de Hacienda británico, George Osborne, ha indicado que Reino Unido prevé establecer un impuesto a los bancos para cubrir los gastos generados por la crisis financiera. Los ministros de Finanzas del G20 ya han descartado adoptar un impuesto similar a nivel global por las reticencias de Canadá y Japón.
El comunicado emitido por la Casa Blanda ha indicado que Cameron informó a Obama en conversación telefónica de las medidas adoptadas en su plan presupuestario. Además, ambos dirigentes dialogaron sobre otros asuntos como Afganistán y Pakistán, así como de la importancia de actuar sobre las redes que financian el terrorismo global.
Pero durante su permanencia en el cargo la economía ha alcanzado un déficit presupuestario de 1,4 billones de dólares el año pasado, que se espera que aumenten a 1,6 billones este año.
La UE replica a Obama que la prioridad es reducir el déficit y la deuda
El presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, enviaron hoy una carta a los países del G-20 en la que defienden que lo prioritario en estos momentos es acelerar la consolidación fiscal para reducir el déficit y la deuda y alertan de los "graves riesgos" que supondría para las cuentas públicas continuar con las políticas de estímulo fiscal.La UE rechaza así la petición del presidente estadounidense, Barack Obama, que la semana pasada reclamó que la cumbre del G-20 que se celebrará los días 26 y 27 de junio en Toronto mantenga los planes de estímulo económico que se pusieron en marcha al inicio de la crisis financiera para no poner en riesgo la recuperación.