Invertir en empresas es rentable
Aunque en la vorágine de la crisis se llegue a olvidar, invertir en Bolsa es invertir en empresas. Por eso es mucho más significativa la nueva percepción de los gestores de fondos, quienes consideran excesivo el castigo de los mercados a la renta variable. La encuesta de Lipper publicada por CincoDías la pasada semana dejaba claro que, por encima de las intensas turbulencias, los gestores de fondos españoles van a aumentar sus posiciones en renta variable.
Los datos empresariales invitan a afinar el rumbo en ese sentido. Los resultados del primer trimestre de las 35 del Ibex han revelado un crecimiento del 20,5% y, salvo catástrofe, 2010 va a poner fin a dos años seguidos de caída del beneficio agregado. Es una evolución que tras los duros ajustes se deberá reflejar en el empleo, y que para los inversores va a tener su mejor contrapartida en forma de mejor retribución. Cuando las cuentas de las empresas entran en el final de la primera mitad del año se puede afirmar que al menos dos tercios de las que forman el Ibex van a aumentar o, al menos, mantener su dividendo. Obviamente, hay que examinar sector a sector. Los hay en que la mejora de beneficios muestra visibilidad clara, mientras que el sector bancario, por ejemplo, verá presionado el beneficio por el aumento de la morosidad y las mayores exigencias de provisiones. Esto reactivará las nuevas formas de remuneración, como el pago de dividendo con títulos de autocartera o el scrip dividend (ampliación liberada en la que la empresa se compromete a adquirir los derechos de suscripción a un precio determinado), aplicado ya por Santander y que este año también usarán Iberdrola o Gamesa.
Los expertos coinciden en que serán las empresas más ligadas al ciclo económico las que más mejoren sus cuentas y, consecuentemente, también los dividendos, si son capaces de mantener el pay out. El nivel de los precios a que está la Bolsa, es decir, si está cara o barata, se sabe, entre otras cosas, por la rentabilidad. Este indicador, uno de los más empleados, está, según muestra el consenso recopilado por Factset, en una de las mayores cotas de los últimos tiempos. A los precios actuales, 21 de las 35 compañías que forman el Ibex presentan una rentabilidad por dividendo superior al 4,5%, que es el tipo de interés en torno al que se mueven los bonos públicos a 10 años del Reino de España en el mercado secundario y en plenas tensiones de la deuda.
El hecho de que Telefónica y Santander, los dos pilares básicos de la Bolsa española, estén a la cabeza en rendimiento por dividendo es igualmente un dato esperanzador, si se tiene en cuenta que esta rentabilidad es clave en una cartera a largo plazo. Pero, más allá de esto, las empresas en Bolsa ofrecen claras oportunidades en este momento, incluso aunque la recuperación no sea intensa y alguna se llegue a ver obligada a cortar su remuneración al accionista.