_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El estrés de la banca UE

Michel Barnier quiere una Europa mejor preparada para la próxima crisis financiera. Pero el director del plan del mercado financiero de la UE para gravar a los bancos parece no centrarse en lo esencial. La presión de Timothy Geithner para realizar pruebas de estrés a todos los bancos de la UE plantea preguntas en sí. Pero al menos, el secretario del Tesoro de EE UU ha identificado el problema al que se enfrenta el sistema financiero europeo.

La crisis actual de la eurozona tiene su origen en la deuda soberana. Pero las preocupaciones sobre la exposición de los bancos han tensionado los mercados financieros interbancarios europeos. También hay señales de que los fondos del mercado financiero de EE UU, con más de 500.000 millones de euros en activos financieros de la eurozona, retroceden.

Una prueba de estrés a todos los bancos de la UE podría aumentar la confianza. EE UU lo hizo el año pasado cuando forzó a los mayores bancos del país a someter sus balances a una serie de escenarios extremos, y a incrementar capital extra si fuera necesario. La prueba y la decisión de publicar los resultados, están ampliamente acreditada con un incremento de la confianza en los bancos estadounidenses. La UE dice que hizo algo similar. Pero los resultados nunca se hicieron públicos, y la prueba no parece haber provocado un gran aumento del capital de los bancos.

Geithner tiene motivos para preocuparse. Una crisis bancaria en la UE en toda regla podría extenderse rápidamente por el mundo y socavar los propios esfuerzos de su administración para apuntalar la confianza. Adoptar el enfoque de EE UU podría no ser tan fácil como él sugiere. Pero restaurar la confianza en los bancos europeos es uno de los más apremiantes desafíos a los que se enfrentan los responsables políticos. Algo que los nuevos impuestos a los bancos -o a las ventas a corto no pueden lograr-.

Peter Thall Larsen

Archivado En

_
_