Campofrío emite 500 millones en bonos para refinanciar deuda
Campofrío va a realizar una emisión de bonos por valor de 500 millones de euros. De esta forma, cubre su actual endeudamiento, que ronda los 460 millones. Además, prorroga el vencimiento de la deuda a tres años, desde 2013 a 2016. La compañía cárnica también explica que con la emisión trata de integrar su estructura financiera en la de su principal accionista, el grupo estadounidense Smithfield.
Hace sólo una semana, el grupo de alimentación Campofrío aseguraba que estaba estudiando diferentes alternativas para refinanciar su deuda. Ayer fue un paso más allá al asegurar que tiene intención de realizar una emisión de bonos simples, que denomina senior unsecured notes, y que están valorados en 500 millones de euros.
A finales del primer semestre del año, la deuda del grupo cárnico ascendía a 460 millones de euros. De esta forma, la empresa presidida por Pedro Ballvé podrá cancelar su deuda y "darle otro perfil", según apunta el grupo.
Campofrío explicaba ayer a la CNMV que los bonos tendrán como fecha de vencimiento el año 2016. De esta forma, extenderá la financiación durante tres años más, ya que el plazo de vencimiento de su deuda actual estaba fijado para el ejercicio 2013. Además, Campofrío explica que con este movimiento trata de "integrar su estructura financiera" y actualizarla tras su fusión con la división europea del grupo estadounidense Smithfield, que además es el principal accionista de Campofrío.
Cuando el grupo adelantó su intención de reestructurar su deuda, aseguraba que una de las posibilidades sobre la mesa era recurrir a nueva financiación bancaria. Sin embargo, condicionó ésta a la evolución del sector financiero, por lo que Campofrío parece haber encontrado más facilidades en la emisión de bonos que en las condiciones marcadas por la banca.
Este movimiento de Campofrío se produce, además, después de los pasos dados por Smithfield (que alcanza el 36,9% del capital del grupo cárnico). Su matriz lanzó al mercado un emisión de acciones con la que captó cerca de 200 millones de euros.
Tras el anuncio de Campofrío, las principales agencias de calificación modificaron su valoración de la empresa de alimentación. Por ejemplo, Standard and Poor's (S&P) adelantó que elevará el rating de la empresa desde B a B+, siempre que ésta complete con éxito la emisión. S&P sitúa actualmente a Campofrío dentro del grado especulativo, también conocido como bonos basura.
En un comunicado, asegura que la asignación del rating B a largo plazo, está acompañado de su colocación en CreditWatch con implicaciones positivas. Según la analista de S&P, Florence Devevey, el rating corporativo está determinado por el apalancamiento financiero de Campofrío.
Por su parte, la agencia Moody's ha asignado a Campofrío el rating B1, es decir, cuatro niveles por debajo del grado de inversión. La calificación de Moody's a los bonos será (P)B1.
Ligera caída de su valor anual en Bolsa
En lo que va de año las acciones de Campofrío han reducido su valor ligeramente, en concreto, un 2,33%. El mercado tampoco respondió positivamente al anuncio de la emisión de bonos. Ayer, los títulos del grupo de alimentación se apuntaron una caída del 1,8% y cuestan en el parqué madrileño 7,07 euros. Sin embargo, la fusión con Smithfield ha sido positiva para sus resultados ya que las ventas en el primer semestre se incrementaron un 93% hasta alcanzar los 882 millones de euros.