"En 2011 habrá mil salas digitales de 3D en España"

Reivindica las tres dimensiones como soporte audiovisual definitivo. La proyección de contenidos alternativos es su apuesta a través de La Quinta Pared. Dice que viene a transformar el modelo actual de negocio porque hay "una masa crítica" que pide salas adaptadas.

Rafael Alvero (Cintruénigo, Navarra, 1955) fue jefe de producto internacional en España del disco más vendido de todos los tiempos: Thriller, de Michael Jackson. Y lo suelta así, sin más, mientras habla de la primera productora y distribuidora europea de contenidos alternativos para salas digitales. Tras 27 años entre discográficas y montajes cinematográficos, La Quinta Pared es su proyecto más ambicioso, "un nuevo telón de fondo en el que proyectar". Flamenco, ópera, ballet, teatro, zarzuela, músicas del mundo en directo y hasta videojuegos. Y todo, en tres dimensiones. Abierto a estilos más contemporáneos, presentará su primera propuesta en el Festival de San Sebastián: Flamenco on Screen, con Antonio Canales. "Tengo un síndrome de pionero que, a veces me quita el sueño", admite.

¿Qué tiene el 3D que no tengan los soportes audiovisuales tradicionales?

Es su momento. La migración digital se está imponiendo. Frente a los límites de las giras, el 3D es simultaneidad. El mismo espectáculo en directo en distintos partes del mundo. Esto promueve la carrera del artista y éste cubre igualmente las expectativas de los aficionados.

"Es el momento de las tres dimensiones porque la migración digital se está imponiendo"

Dice que La Quinta pared es la primera productora y distribuidora de contenidos alternativos en 3D en España, ¿qué lugar ocupa en Europa?

Somos precursores en Europa. Está la belga XDC, pero sólo comercializa los equipos, y la productora More 2 Screen, que opera en Italia. Así que somos los primeros. El sector del cine tiene la necesidad de modificar su plan. El digital es una apuesta que en España ha tardado en aceptarse. Supone un ahorro inmenso. Al final se impone el producto en los cines.

¿Por qué se ha decantado por los contenidos alternativos?

No hay mucha oferta de producción alternativa en 3D. Se ha empezado a hacer ópera en alta definición, pero poco. Es una herramienta de distribución masiva. Hemos empezado con el flamenco porque vive un despertar del talento. Ya tenemos acuerdos con Egipto. En las salas de cine, el sonido ha mejorado, pero no lo suficiente. La música, el zapateado, la percusión... El 3D crea un ambiente envolvente. Antonio Canales dice que el 3D es la arquitectura del flamenco.

Aunque los contenidos alternativos en 3D supongan una nueva tendencia cinematográfica, ¿hay suficiente público para espectáculos artísticos minoritarios?

Hay tres millones de aficionados en el mundo al flamenco. Esto es el principio de algo que va a multiplicarse por mucho. Hay que evitar el estereotipo, esa es nuestra apuesta: espectáculos que podrían competir en Broadway. Flamenco on Screen tiene vocación de e-commerce.

¿Cómo se adaptan las salas de cine españolas al 3D?

Lentas, pero la decisión está tomada. En Hollywood, los grandes (George Lucas y Steven Spielberg) ya están trabajando en 3D. La prueba es que, en 2009, Ice Age se distribuyó en 125 salas nacionales. Aunque el espaldarazo definitivo lo va a dar James Cameron con su nueva película Avatar.

Augura que habrá 200 salas de cine adaptadas cuando acabe 2009. ¿No es una previsión muy optimista?

El problema ahora es más la escasa oferta ante la gran demanda de las salas. En 2011 habrá más de mil salas adaptadas porque la masa crítica existe y hay mucha necesidad, no hay más que ver la respuesta que ha tenido Ice Age.

Pero no se puede comparar los resultados de una película supertaquillera como Ice Age con un espectáculo de World music

Eso es cierto, pero si las salas se transforman, habrá oportunidades para todos. La cuestión es cambiar el modelo de negocio. Hay que crear temporadas: distintos espectáculos para no cansar a los espectadores. De momento, hemos creado ocho espectáculos para 2010. La gente tiene que saber que hay más eventos. Esto es un negocio en un momento oportuno. El axioma es: el que da primero, da dos veces.

¿Y los cines del país seguirán la tendencia que usted pronostica?

El cine tiene que renovarse. Y yo tengo un síndrome pionero que, a veces, me quita el sueño. De hecho, estoy a punto de cerrar la posproducción con una compañía de grabación tecnológica. Un contrato de cuatro años.

De videojuegos, gafas de sol y Vetusta Morla

La explosión de las tres dimensiones puede llegar a la moda. Así lo augura Rafael Alvero, cuando dice, más en serio que en broma, que "los grandes diseñadores acabarán haciendo gafas de 3D para que la gente las use fuera del cine". Alvero advierte que en los contenidos digitales en 3D "no vale todo". Pero en La Quinta Pared no se quiere limitar a la música tradicional ("estoy en conversaciones con la banda de rock Vetusta Morla"), ni siquiera en danza. Por eso, ha creado una oficina de grandes jugadores de videojuegos para competiciones internacionales en 3D. En España, la compañía Yelmo ya ha invertido en este sentido, pero es de las pocas. En el caso de La Quinta Pared, "es una licencia para experimentar, un guiño contemporáneo a lo que viene después". De momento se reduce a un proyecto embrionario, pero Alvero quiere tocar más palos.Este emprendedor en tiempos difíciles pretende lograr, en cinco años, unos beneficios bruto de explotación de 130 millones. La empresa está valorada en 3,7 millones de euros, con una aportación inicial de 1.6 millones. Según sus previsiones, el precio de la entrada para cualquiera de sus espectáculos rondará los 12 euros. "Todo apunta a que el entretenimiento es una válvula de escape para la gente cuando no se puede comprar una casa. Es una tabla de salvación". Encima, la complejidad de las tres dimensiones "imposibilita el pirateo" de los productos digitales. Si para el bailaor Antonio Canales, la tecnología 3D es sinónimo de arquitectura, Alvero la define como una mezcla de "riesgo y adrenalina".