El Supremo de EE UU permite la venta de Chrysler a Fiat

El Tribunal Supremo emitió anoche una nota de dos folios con la que niega el procedimiento de urgencia en el que se ampararon los fondos de pensiones públicos de Indiana para pedir que se cancelara la venta de Chrysler a Fiat.

Después de una tensa espera, el pleno de Alto Tribunal decidió ayer a última hora permitir la transacción que asegura la salida de Chrysler del concurso de acreedores. La Corte aceptó el lunes estudiar el caso presentado por los fondos de pensiones de Indiana pero el martes por la noche decidió que procesalmente no se justificaba una intervención de emergencia tal y como se pedía.

La opinión de los magistrados se limita solo a aspectos procesales y no entra al fondo del asunto planteado por los fondos, la ilegalidad del pacto entre Gobierno y partes para alterar la prelación de los acreedores de Chrysler y el hecho de que el Ejecutivo usó dinero del TARP, el plan de ayuda a la banca, para apoyar a la automovilística. El Tribunal dice, en cualquier caso, que su decisión solo es vinculante para este caso, el de Chrysler, algo que no cierra la puerta a un segundo intento por parte de los acreedores en el caso de General Motors, que está en un concurso muy similar al de su competidora de Detroit.

La decisión de los magistrados se produjo apenas unas horas después de que Fiat dijera que perderían el interés sobre el fabricante de la marca Dodge si la venta no se pudiera cerrar antes del 15 de junio, fecha en la que la automovilística italiana se podía retirar del pacto. Esta declaración contrastaba con la que se hizo pública en la mañana del martes en la que el grupo de Turín se mostraba más paciente con el posible desenlace del Tribunal.

Una vez superado este obstáculo, queda ya expedita la vía para que Fiat tome el 20% de la empresa de Detroit, con opción a conseguir un 15%, y se haga cargo de la gestión.