CAF pierde el contrato del tranvía de Amán al no encontrar financiación
El Gobierno jordano ha retirado al consorcio hispano-kuwaití encabezado por las españolas CAF e Ineco Tifsa el contrato de 250 millones suscrito para la construcción del tren ligero que conectará la capital Amán y Zarqa, uno de los principales nodos industriales del país, tras no haber sido capaces las concesionarias de obtener la financiación necesaria para el proyecto en el plazo previsto.
Los responsables del fabricante español de equipos ferroviarios, CAF, y de la plataforma pública de proyectos de ingeniería, Ineco Tifsa, acaban de comprobar en primera persona los demoledores efectos que sobre la actividad empresarial está teniendo la crisis financiera global.
El Gobierno jordano ha decidido retirar al consorcio hispano kuwaití en el que estaban integradas ambas firmas el contrato de 250 millones de euros adjudicado para la construcción del tren ligero entre la capital Amán y la ciudad de Zarqa, uno de los centros industriales más importantes del país, tras haber vencido el plazo otorgado por las autoridades locales al consorcio para obtener financiación privada para la ejecución del proyecto, sin que éste la haya conseguido.
CAF, Ineco Tifsa y Aknan Global, una firma constructora de Kuwait, han tenido un año para lograr los fondos estipulados en el contrato, pero no han cerrado una solución financiera satisfactoria para el Ejecutivo de Amán, que, además, pretendía finalizar la infraestructura en un plazo récord de 18 meses.
Según fuentes cercanas al proyecto citadas por medios locales "el acuerdo estipulaba que el consorcio debería conseguir financiación antes del mes de abril y no lo han conseguido", lo cual sería el motivo por el cual Amán ha decidido dar por resuelto el contrato. Desde Ineco Tifsa se ponen matices a la versión deslizada por elMinisterio de Transportes jordano. "Ha sido un proceso muy difícil y lleno de obstáculos, en el que nunca hemos tenido del todo claro qué teníamos que hacer", señala un fuente de la empresa pública, que estaba encargada de diseñar el proyecto de ingeniería.
Solución íntegramente española
En CAF el descontento es todavía más patente. El fabricante español -principal socio industrial del consorcio- ha completado con éxito proyectos similares en tres continentes y no se termina de explicar cómo les han podido resolver el contrato por problemas de financiación.
"Es evidente que algo se ha hecho mal a la hora de presentar la solución financiera", admiten en la compañía. Aunque ni CAF ni Ineco Tifsa apuntan al tercer miembro del consorcio, la constructora kuwaití Aknan Global, a la hora de buscar responsabilidades por la resolución anticipada del contrato, indirectamente parecen culparla de la decisión del Ejecutivo jordano.
De hecho, según fuentes de CAF las dos compañías españolas están decididas a volver a concurrir al concurso, aunque ahora con "un consorcio íntegramente español". Para ello, el fabricante de componentes y sistemas para infraestructuras ferroviarias está rastreando la posible incorporación de algún otro socio industrial y de uno de carácter financiero para evitar los errores cometidos en esta ocasión.
Lo que ocurre es que la naturaleza del proyecto será ya diferente. El Gobierno jordano ha decidido abandonar la opción de la financiación privada y ha adelantado que el futuro contrato se dividirá en lotes, será sólo de construcción y se financiará íntegramente con fondos públicos.