El Parlamento británico aboga por que BAA venda aeropuertos
La Comisión de Transportes de la Cámara de los Comunes del Reino Unido ha elaborado un informe en el que señala que es conveniente que disminuya el peso de BAA, filial de Ferrovial, en la gestión de aeropuertos británicos. Una 'mala administración de los recursos' es la causa esgrimida.
BAA, con siete de los principales aeropuertos de Reino Unido en su cesta de activos, está en el punto de mira de la Cámara de los Comunes. En un estudio difundido el sábado, la Comisión de Transportes carga contra la empresa por lo que entiende una falta de previsión de los problemas en unas instalaciones por las que pasaron 150 millones de personas en 2007.
Entre los aeródromos de la filial de Ferrovial se encuentran los tres más importantes de Londres: Heathrow, Gatwick y Stansted. Sobre ellos, el informe argumenta que 'ha fracasado' la planificación de 'contingencias que estaban lejos de ser impredecibles'.
Los miembros de la Comisión de Transportes entienden que 'la situación de monopolio de BAA en Reino Unido es mala para los pasajeros y para el sector'. Entre sus críticas, los autores sólo dejan un pequeño margen a favor de Ferrovial al reconocer que la amenaza de ataques terroristas hace inevitables intensivos controles de seguridad que derivan en tiempo de espera para los usuarios.
En su conclusión, el documento apunta que un reparto de la actual cuota de mercado de BAA incidiría en una mejora del servicio: 'Creemos que hay sitio para la competencia, especialmente en los aeropuertos de Londres, y que acabar con el actual sistema de gestión ayudaría a ello'.
El 90% del tráfico aéreo en Reino Unido pasa por los aeródromos de BAA. Esa situación ha motivado una investigación a cargo de la Comisión de Competencia británica, el malestar de distintas aerolíneas y las quejas de organizaciones de consumidores.
Consciente de la posibilidad de que sea obligada a desinvertir, Ferrovial ya ha señalado en distintas ocasiones que no sería traumático para su negocio deshacerse de uno de sus activos aeroportuarios en Londres, siempre y cuando no se trate de Heathrow, su principal pieza en este negocio. Pese a esta afirmación, la empresa defiende que ningún otro gestor aeroportuario sería capaz de comprometer inversiones para construir la tercera pista de Heathrow, su sexta terminal, o la ampliación de Stansted.
Competencia tiene de plazo hasta marzo de 2009 para ofrecer su dictamen y ya ha manifestado que agotará el plazo. La versión de altos ejecutivos de Ferrovial es que cada uno de los aeropuertos de Londres está enfocado a un tipo de cliente distinto y, por tanto, un cambio en la actual estructura de propiedad no fomentaría una mayor competencia o mejores servicios que los actuales.
De hecho, Heathrow, Gatwick y Stansted soportan tarifas reguladas por el Gobierno y éste obliga a que una importante suma de lo recaudado se reinvierta.
Por otro lado, el informe apoya la expansión de Heathrow a través de la citada tercera pista y de la sexta terminal, proyectos también defendidos por Ferrovial y actulmente en pleno proceso de debate en Reino Unido.
La Reina abre una nueva etapa para Heathrow
'Una puerta al siglo XXI'. De este modo calificó la reina Isabel II la nueva Terminal 5 de Heathrow inaugurada el viernes. El edificio ha requerido una inversión cercana a los 6.000 millones de euros, los trabajos se han alargado durante seis años y por sus pasillos pasarán unos 30 millones de personas al año. La Reina de Inglaterra presidió el acto junto al presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, y los primeros ejecutivos de BAA, Nigel Rudd, y de British Airways, Martin Broughton.Isabel II, que ya inauguró el aeropuerto londinense en 1955, alabó el diseño del la nuevo edificio, a cargo de Rogers Stirk Harbour and Partners.Este abrirá sus puertas al público el próximo 27 de marzo a las 4.55 de la madrugada, cuando está prevista la llegada de un vuelo procedente de Hong Kong.