Rajoy anuncia que se presenta a la reelección pensando en 2012
El líder del PP mantuvo ayer la emoción hasta el final en la reunión vespertina del comité ejecutivo de su partido, cuyos miembros no daban un duro por su continuidad al frente del mismo. Como si hubiera corrido la consigna de prietas las filas, Mariano Rajoy anunció que anticipará a junio el XVI congreso y que se presentará a la reelección como candidato, con el objetivo de ganar las elecciones de 2012. Le respaldaron todos los dirigentes regionales, incluida la madrileña Esperanza Aguirre, quien negó que tenga intención de presentarse para presidir el PP.
El 11-M volvió a escribir ayer páginas para la historia, aunque no en la clave trágica de hace cuatro años. Mariano Rajoy corrigió a todos los que dentro y fuera de su partido pensaban en su próxima retirada y anunció su intención de seguir liderando la derecha española, pese a haber cosechado dos derrotas consecutivas en unas elecciones generales. 'José María Aznar y Felipe González también perdieron dos elecciones y ahí están', recordó para justificarse. Las razones de fondo para mantenerse al frente del partido las resumió de esta forma: 'Primero, porque he mejorado los resultados del PP, con más de diez millones de votos. Segundo, porque es lo mejor para mi partido y para España y tercero, porque tengo un buen proyecto político para los españoles'.
La gestión de la crisis en la que ha sumido al PP la derrota electoral del domingo se pilotará con el siguiente calendario: la Junta Directiva, máximo órgano de dirección, convocará en abril el XVI Congreso para que pueda celebrarse en junio. Allí es donde Rajoy defenderá su candidatura a la reelección como presidente y como candidato electoral.
Rajoy dejó claro que su apuesta no pasa por encauzar una sucesión ordenada, como la mayoría de dirigentes pensaban que haría. No. 'Me presentaré para ser candidato a la Presidencia del Gobierno y ganar las elecciones de 2012?', advirtió. ¿Habrá más candidaturas?', le preguntaron los periodistas. ¿Se sentiría incómodo compitiendo con Esperanza Aguirre?, le insistieron. 'A estas alturas de mi vida me siento incómodo con muy pocas cosas... no sé si habrá más candidaturas o no. Los estatutos dicen que se puede presentar cualquier candidato con el equipo que quiera. Esto es lo que hay', sentenció.
Una vez hecho el anuncio de que el PP no cambiará de líder, al menos hasta junio, el interés radica en saber si Rajoy tiene pensado cambiar de equipo. Tampoco respondió ayer a este interrogante, al anunciar que no hará públicos sus compañeros de viaje hasta la víspera del congreso. Hasta junio, confirmó, no introducirá cambios en la estructura directiva del PP, lo que equivale a decir que Ángel Acebes se mantendrá en la secretaría general. Lo que tampoco se conoce es si prescindirá a corto plazo de Eduardo Zaplana como portavoz del Grupo Parlamentario una vez se inicie la novena legislatura. Tanto Acebes como Zaplana son dos de los dirigentes más contestados en el partido por sus dirigentes regionales ya que reflejan la imagen del pasado.
Estos mismos dirigentes cerraron ayer filas con Rajoy y dieron por buena su decisión de mantenerse al frente del partido. Sin embargo, en privado no son pocos los que consideran que con ello incurre en un serio error, a la vista del escaso margen del que dispondrá el candidato para cambiar su discurso y también del poco recorrido que le queda para ganar nuevos votos con el mismo. Pese a todo, la lectura que el interesado hizo ayer dentro y fuera del comité ejecutivo de los resultados del domingo tiene tonalidades distintas. 'Hemos ganado votos por el centro y votos socialistas. Por eso vamos a defender idénticos principios, idénticos valores para asumir lo que han votado diez millones de españoles'.
Gallardón, un gran activo
Además del respaldo de los 'barones', Rajoy contó con el apoyo de los dos dirigentes del partido que más disgustos le han dado en los últimos años. Tanto la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, como Alberto Ruiz Gallardón, se sumaron a las adhesiones generales. Del segundo dijo Rajoy que es un 'gran activo' para el PP y que siempre confió en que seguiría al frente del Ayuntamiento, porque es un político 'serio'.
Habrá que esperar hasta junio para ver la magnitud de la mudanza que va a intentar gestionar Rajoy, quien ayer presumió de ser 'independiente' y de no dejarse influir por las presiones de algunos medios de comunicación afines al PP que llevan apostando desde el domingo por su dimisión 'Yo no leo mucho, pero me lo cuentan', señaló con su peculiar ironía.
Apuesta por una legislatura difícil marcada por la crisis económica
Altos dirigentes del PP confirmaron ayer que la meditada apuesta de Rajoy por la continuidad se explica, en parte, por la opinión ampliamente compartida en el partido de que ésta puede ser una legislatura muy complicada para el Gobierno como consecuencia del empeoramiento de la crisis económica y, por lo tanto, una legislatura posiblemente más corta que la anterior.En la decisión de Rajoy, largamente pensada desde que el domingo por la noche ofreció ese enigmático adiós desde el balcón de Génova, 13, puede haber pesado también el intento de evitar un vacío de poder en el partido en un momento en el que, objetivamente, no se ha producido una debacle electoral en toda regla. Además, el PP contará en la próxima legislatura con un grupo parlamentario mucho más reforzado que en la anterior, de forma particular en el frente económico.El ex presidente de Endesa Manuel Pizarro se sentará en los mismos escaños que los ex ministros Cristóbal Montoro y Juan Costa, trío sobre el que podría pivotar el grueso de la ofensiva del PP contra el vicepresidente Pedro Solbes y su equipo.