_
_
_
_
Distribución

Arnault acaricia el control de Carrefour

La ruptura de la familia Halley abre paso a un nuevo enfoque accionarial

El hombre más rico de Francia ha tomado el control del mayor grupo de distribución europeo. Bernard Arnault, presidente del gigante de la moda LVMH, se ha convertido en la principal referencia accionarial de Carrefour y sin tener que elevar su participación en la compañía.

La inversión de Arnault en la cadena de hipermercados data de marzo de 2007, cuando se hizo con el 9,1% del capital a través de un vehículo inversor, Blue Capital, que comparte con la firma de inversión estadounidense Colony Capital. Sin embargo, Arnault y su socio han tenido que esperar casi un año para ganar peso en la sociedad. Todo gracias a la decisión de la familia Halley, principal accionista de Carrefour, de romper el pacto que mantenía vinculado su 13% del accionariado.

El clan familiar, que preside el grupo en la persona de Robert Halley, controla el 10% de los títulos a través de las instrumentales Comet BV, Halley Participacions y, el resto de manera directa, repartido entre los distintos miembros de la familia. Además alcanzan el 23% de los derechos de voto. Su participación en la compañía se remonta a la década de los 90, cuando fusionaron su enseña Promodès con el grupo de distribución. Según consta en el regulador bursátil galo, los Halley se comprometían a no llegar a acuerdos con otros accionistas de Carrefour, pero tras romper el pacto (que se hará oficial en la próxima junta de accionistas del 15 de abril) tienen vía libre para vender sus acciones.

Los Halley han descartado su desvinculación del grupo de distribución y aseguran mantener su confianza en el directorio y en su máximo responsable ejecutivo, el español, José Luis Durán. Sin embargo, sí que perderán los dos puestos en el consejo de supervisión que poseen a través de sus dos sociedades, aunque tienen intención de mantener la presidencia.

Una vez conocida la decisión de los Halley, Blue Capital ha señalado que tomará su rol como principal accionista ya que 'pretende explotar la habilidad del grupo para crear valor', dejando así la puerta abierta a un cambio de estrategia. Los movimientos en el accionariado de Carrefour han coincidido con la presentación de los resultados de 2007, aunque José Luis Durán esquivó valorarlos ante los inversores. Analistas como Citigroup sí lo han hecho y por ahora descartan que Blue Capital eleve su participación en la cadena de hipermercados. Tampoco parece viable la entrada de nuevos accionistas dada la elevada capitalización de Carrefour (más de 34.000 millones). El mercado ha respondido positivamente, ya que la cadena de distribución se apuntó ayer un alza en Bolsa del 4%.

Busca comprador para su división inmobiliaria

Los primeros cambios en la gestión de Carrefour ya son un hecho. Hace unos meses, el grupo hizo pública su intención de colocar en Bolsa parte de su división inmobiliaria. Sin embargo, las turbulencias en los mercados financieros le llevaron a dar marcha atrás en su decisión y a posponer la colocación en el parqué hasta que lleguen tiempos más estables, lo más probable en 2009.La prensa gala veía las manos de Arnault detrás de la decisión de escindir la división inmobiliaria para elevar así la retribución a los accionistas, gracias a los 3.000 millones que pretendía obtener. Ahora los planes del grupo pasan por captar este año 1.500 millones a través de la venta de una parte de la división, previsiblemente, a inversores privados, según reconoció ayer Durán.

La cifra

6,8% es el alza de las ventas netas del grupo en 2007, 82.148 millones. De ellos, 37.621 millones se lograron en Francia, donde el crecimiento fue sólo del 1,1%.

Archivado En

_
_