La Unesco se pone firme con las grandes capitales
El turismo de masas, la presión inmobiliaria y el apetito petrolero amenazan los tesoros de las urbes ricas y emblemáticas
Una de las primeras cosas que llaman la atención al viajero cuando visita un monumento histórico, una ciudad emblemática o los vestigios de una civilización como la egipcia es el cartel 'está usted visitando el patrimonio universal protegido por la Unesco'. El sello no sólo designa el reconocimiento y la importancia del lugar en cuestión, sino que también supone generosos ingresos para el país que lo aloja. Allí donde figura la Unesco, el turismo crece casi de forma automática.
Ahora, el turismo, que ya es de masas, se ha convertido en un arma de doble filo. A la democratización de este sector se suma la presión inmobiliaria en las ciudades, el apetito de la industria petrolera e incluso el cambio climático, nuevas amenazas que ya han valido a 33 de los 851 lugares protegidos por el organismo el sello de 'patrimonio mundial en peligro'. Y en algunos casos, la desaparición pura y dura de la lista.
El caso más sonado hasta el momento fue la inclusión en 2007 de Las Galápagos entre los lugares amenazados. Este archipiélago de 13 islas en Ecuador era hasta el pasado año considerado el último reducto ajeno a la mano del hombre, el lugar que sirvió de laboratorio biológico para las teorías de Charles Darwin y donde focas, tortugas gigantes e iguanas viven entre impresionantes paisajes naturales coronados por volcanes, ajenas a la globalización económica. Los viajes en crucero por las aguas del archipiélago 'han aumentado en un 150% el número de visitantes en los últimos quince años' alterando el dulce paraíso de esta reserva natural, según reconocen desde la Unesco, con sede en París.
La petrolera Gazprom proyecta levantar una torre de 320 metros en San Petersburgo
En MachuPichu (Perú), el organismo se ha opuesto a la construcción de un teleférico que pretendía aumentar el flujo de visitantes, temiendo la degradación de un vestigio inca. También pudo hacer uso de su autoridad en los templos de Angkor (Camboya) con el objetivo de frenar la locura turística. 'Los hoteles crecían como champiñones, la capacidad hotelera se ha cuadruplicado', explica el organismo en la prensa gala.
En las ciudades, sin embargo, la degradación es más flagrante, y la Unesco reconoce que ya no tiene tanta autoridad para imponer la salvaguarda de estos espacios. Pero aún tiene en su mano la posibilidad de sacarlos de su clasificación de tesoros protegidos o incluirlos en la lista negra de lugares en peligro.
Las urbes representan el 25% de los lugares protegidos por el organismo y son, de facto, las más amenazadas, debido a la presión inmobiliaria y a la entrega incondicional a los rascacielos. Si en los años sesenta y setenta los centros históricos eran abandonados, hoy se han erigido en lugares magníficos que atraen el apetito inversor. Y la construcción de oficinas, centros comerciales y sedes de empresas en inmensas torres amenazan paisajes cargados de historia y uniformizan el estilo de las ciudades, en pleno fenómeno de mimetismo arquitectónico.
SAN PETERSBURGO
'La ciudad horizontal por excelencia' y la mejor conservada de Europa, según la Unesco, tiene sobre sus armoniosas líneas la amenaza del proyecto del gigante del oro negro Gazprom. La compañía petrolera proyecta la construcción de toda una ciudad homónima en la que se prevé la construcción de una torre de descomunales dimensiones.
De realizarse, la Torre Gazprom se elevará 320 metros por encima de San Petersburgo rompiendo para siempre la armonía de formas y proporciones que caracterizan la ciudad fundada por Pedro I en 1703. Con semejante proyecto San Petersburgo aspira a convertirse en la capital de la energía en Rusia. La forma del edificio será una torre de vidrio de planta pentagonal que cambiará de color a medida que el Sol vaya alcanzándola e imitará la llama del logotipo del gigante petrolero.
La Unesco no puede oponerse a la construcción de un proyecto que ha sido tildado de 'bofetón para todos los ciudadanos' por el historiador Daniel Kotsiubinsky, pero no ha dudado en amenazar con borrar la ciudad de su lista si finalmente el proyecto sale adelante. 'Si no, sería una clara señal de que no hay límites y puede hacerse cualquier cosa', explicó en la prensa francesa Francesco Bandarin, director del Centro de Patrimonio Mundial de la organización y responsable del control de los lugares que entran en el listado. La Unesco decidirá este año si incluye a San Petersburgo en su lista de patrimonio mundial en peligro.
LONDRES
También Londres ha sido señalada por el organismo cultural de la ONU. Al igual que la ciudad rusa, la Unesco estudia incluir la Torre de Londres en su lista de lugares en peligro por la creciente e imparable construcción de torres y rascacielos. La vista desde la histórica fortaleza que mandó construir Guillermo el Conquistador en 1078 tras haberse hecho con el Gobierno de las islas, quedará invadida por edificios monumentales.
Los alrededores empiezan a ver la construcción de rascacielos, entre los que destacará un 'fragmento de vidrio' de 310 metros que aspira a convertirse en la torre más alta de Reino Unido cuando quede terminado, en el año 2010. El proyecto para la construcción del edificio Minerva, que debía alcanzar una altura de 200 metros, ha visto finalmente menguar sus dimensiones por la intervención de la Unesco. La Torre de Londres sería el único monumento de un país rico que entraría a formar parte de los malos alumnos en conservación del patrimonio histórico.
Algo que, sin embargo, no resulta nada fácil. El acuerdo con el país que alberga el monumento o el lugar amenazados por la degradación es imprescindible para incluirlo entre los lugares en peligro. Y muchos se niegan, por la mala reputación que ello generaría y el consiguiente bajón del turismo. En el caso de las islas Galápagos, que fueron incluidas en 2007, 'hemos tardado cuatro años en hacerlo. De continuar así, el archipiélago corría el riesgo de convertirse en las islas Canarias', según el organismo.
COLONIA
La catedral de esta ciudad alemana, considerada una obra maestra de la arquitectura gótica, entró hace unos años en la impopular lista negra. Así lo decidió la Unesco en 2004 debido a los proyectos de construcción de varios edificios que hubieran anulado la vista del magnífico edificio. La advertencia surtió efecto y Colonia dio marcha atrás prefiriendo salvaguardar el monumento más visitado de Alemania.
DRESDE
El hermoso valle del Elba, en Dresde, entró en la lista del patrimonio universal de la Unesco en 2005. Poco después, este paseo de 20 kilómetros entre el palacio de Pillnitz y el castillo æoelig;bigau fue incluido en la lista de tesoros en peligro. La razón, el proyecto de construcción de un puente de cuatro carriles, que habría tenido un impacto negativo en el entorno. Por el momento, la ciudad ha desistido de su intento y ha anulado el proyecto, aunque el valle sigue incluido entre los lugares en peligro.
Oviedo pide la inclusión en la 'lista negra'
Como si de Nueva York se tratase, la ciudad asturiana de Oviedo proyecta la construcción de tres imponentes torres, las trillizas, del arquitecto Calatrava, de 133 metros de altura cada una. El problema no es sólo que las tres hermanas romperían con la tradición arquitectónica que ha dado identidad a Europa, sino que, además, se situarán a muy poca distancia de tres de los bienes del prerrománico asturiano de la ciudad incluidos en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, a saber: la Cámara Santa, Foncalada y San Julián de los Prados. Además, la torre de la catedral quedaría prácticamente anulada por el nuevo proyecto. El impacto visual alcanzaría la joya asturiana del prerrománico asturiano, la iglesia de Santa María del Naranco. El proyecto no tiene los favores del público, que ve en las nuevas torres trillizas al más puro estilo neoyorquino, un claro reclamo para los movimientos especulativos. El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios, entidad asesora de la Unesco, ha ido más lejos pidiendo entrar de forma voluntaria en la lista negra de lugares y monumentos en peligro mientras el proyecto siga en marcha. Protegerán así, dicen, una de las más bellas herencias históricas de España y de Europa.