Airbus España, ejemplo de éxito
La crisis de la multinacional EADS, fabricante del superavión europeo Airbus 380, ha sido uno de los episodios más tristes de la industria europea y del proyecto comunitario en los últimos años. Los retrasos en la que iba a ser la aeronave con más capacidad de pasaje de la industria aeronáutica del planeta, tanto por fallos industriales como por una alambicada cogestión empresarial y política, han estado a punto de enterrar el ambicioso proyecto industrial diseñado para resucitar el negocio europeo de la aviación civil. Además, han estado también a punto de entregar el mercado en bandeja de plata a los competidores norteamericanos de Boeing, que ahora podrían tener similares dificultades.
Tras una agitada tormenta política y una lucha abierta por la gestión de la compañía, con el escándalo de uso de información privilegiada en el que estuvieron implicados los máximos directivos del grupo, se ha recuperado la normalidad. Pero por el camino, tras varios ajustes en su accionariado, han perdido su empleo miles de trabajadores en todos los países en los que, por partes, se fabrican las piezas del Airbus antes de su ensamblaje definitivo en Toulouse y Hamburgo.
Pero España ha salido bien parada del ajuste. Tras anuncios iniciales de recorte de empleo en los tres centros que trabajan para la multinacional (Getafe, Puerto Real e Illescas), la empresa salvará la actividad de los tres por la excelencia tecnológica de todos ellos. El grado de tecnificación en el proceso de fabricación de elementos aerodinámicos con fibra de carbono, muy superior al empleado en los centros germanos, ha desplazado la actividad hacia las factorías españolas, hasta el punto de que, según las interpretaciones más optimistas, podrían verse obligadas a elevar sus plantillas para cumplir los calendarios del A-350.
Este es un clarísimo ejemplo del grado de excelencia de determinadas actividades industriales españolas, tras varios años en los bancos de pruebas de la I+D, y estimula a incrementar la investigación para poder trasvasar lentamente el modelo de crecimiento hacia la generación industrial de alto valor añadido. Todo un auténtico reto.