Londres refuerza su amenaza contra el control de Ferrovial en los aeropuertos
Las autoridades británicas van a volver del revés los aeropuertos de Ferrovial. La Comisión de Competencia avisó ayer de que ampliará al máximo la investigación sobre la posición de dominio de la filial BAA hasta el punto de examinar hasta las compras de suelo, además de inversiones y servicios. Si decide que va contra la competencia, tomará medidas. Inmediatamente, las aerolíneas del país clamaron para que la institución rompa cuanto antes el monopolio de BAA.
El primer informe que emite la Comisión de Competencia británica sobre la posición de dominio de BAA está lleno de avisos. No hay conclusiones, como anunció. Pero amenaza con un 'remedio adecuado' con medidas 'estructurales o de conducta' si considera que el control de BAA sobre siete aeropuertos (opera el 60% del tráfico aéreo del país) vulnera la libre competencia. A la luz del documento, los analistas ven muy posible que obligue a Ferrovial a vender algún aeropuerto.
Antes de dar su veredicto va a intensificar al máximo la investigación hasta puntos que hasta ahora no habían trascendido. De hecho, anuncia que analizará hasta las compras de suelo que BAA no destine a uso de sus aeropuertos y pueda vender a otras compañías con un beneficio significativo. El foco va a estar en los aeropuertos de Londres, Heathrow, el mayor de Europa, junto a Gatwick y Stansted, todos ellos regulados.
La lista de los aspectos que Competencia someterá a un severo filtro es larga. Empieza por las inversiones de la filial que, según las aerolíneas, son escasas en Heathrow y Gatwick.
La Competition Commission va a estudiar si obligando a BAA vender algún aeropuerto mejora el grado de inversión. Y va más allá. Va a comparar los resultados en innovación con otros gestores de aeropuertos europeos, entre los que puede incluir a AENA. Además, el organismo se hace eco de la 'preocupación' de las aerolíneas por la deuda que ha generado a Ferrovial y sus socios (la Caisse du Québec y el fondo GIC del Gobierno de Singapur) la compra de BAA por 15.000 millones de euros y su efecto en el apalancamiento (deuda sobre fondos propios) de la filial de cara a inversiones y servicios.
BAA, por su parte ya prometió en su día una inversión de 9.300 millones de libras (13.600 millones de euros) en los próximos once años, además de la puesta en marcha de la terminal 5 en Heathrow y nuevas pistas.
Los servicios serán la siguiente parada. Competencia incide en que la OFT, que protege los derechos de los consumidores y le remitió el expediente, destaca la 'pobre calidad' en Heathrow y Gatwick. Pero hay más. Investigará si la filial de Ferrovial ha intentado monopolizar los servicios de tecnología de la información en Heathrow, como las redes de Wifi en la T-5.
El nivel de la investigación es tal que estudiará desde las tasas que BAA cobra a los autobuses, pasando por el contrato con los taxis, hasta comprobar si su web ofrece sólo su aparcamiento y no otros. Y analizará si esto interfiere en la competencia de operadores independientes. No olvida tampoco Competencia un asunto clave: las tasas que cobra a las aerolíneas, que se quejan de pagar lo mismo por usar terminales de diferente calidad en Heathrow y Gatwick.
Para las primeras conclusiones habrá que esperar hasta principios de 2008 y hasta diciembre para las definitivas.
Las aerolíneas británicas, sobre todo British Airways, Ryanair y Virgin, aprovecharon ayer para elevar la presión que ejercen desde que la constructora de la familia Pino compró BAA hace un año. Claman para que Competencia acelere trámites para obligar a Ferrovial a vender aeropuertos por 'monopolio abusivo'. La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) apoyó ayer la investigación.
Mientras, Ferrovial rechaza vender porque 'no es la solución' e insiste en que necesita un sistema de precios y de retorno de capital mejor para acometer inversiones y mejorar los servicios.
Férreo examen a la filial de 'handling' Swissport
Swissport no se libra de la férrea investigación de las autoridades de Competencia en Reino Unido. Les preocupa que Ferrovial sea la dueña de este gran operador de servicios en aeropuertos (handling) que opera en dos de los que tiene la también filial BAA: Gatwick y Stansted. Quieren asegurarse de que BAA no le da condiciones 'preferentes'. Aunque, a renglón seguido, destacan que la UE ya lo estudió y no vio problemas.Por otro lado, da mucha importancia a la necesidad de valorar cómo afecta a la competencia que los tres aeropuertos de Londres sean de precios regulados. Y se muestra dura cuando habla de comprobar la crítica de que BAA ha sido poco dinámica a la hora de solucionar restricciones al desarrollo de sus aeropuertos y más bien ha esperado al resultado de la política del Gobierno.Heathrow, Gatwick y Stansted, por los que pasa el 89% de pasajeros del sureste de Inglaterra son el centro de los temores de las autoridades británicas. Sobre todo por dos cuestiones: las situaciones de caos que se han vivido en Heathrow y la negociación en paralelo entre la Autoridad Civil de Aviación y BAA sobre las nuevas tasas que cobrará a las aerolíneas a partir de marzo. Esto también preocupa a Ferrovial, no en vano BAA es su inversión estrella. Ayer sorteó el castigo de la Bolsa y subió un 0,81%.
Impacto en la Deuda
El informe de Competencia llega en plena renegociación de la deuda que generó a Ferrovial la compra de BAA. El grupo quiere refinanciarla con una emisión récord de bonos por más de 12.000 millones. La duda es si el expediente afectará a la negociación con la banca.