Trujillo ultima un estudio que revelará cómo está ocupado el suelo y en manos de quién
La ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, anunció ayer en el Foro de la Nueva Economía que en septiembre se hará público el Atlas Estadístico de las Áreas Urbanas de España 2006. Este estudio abordará, en opinión de la ministra, dos cuestiones clave para el mercado en la coyuntura actual. La primera, cómo está distribuida la ocupación del suelo en España y la segunda, cómo está de concentrada su propiedad. Trujillo puso como ejemplo que los datos del programa Corine Land Cover y del Catastro, que por primera vez se explotan, indican casos muy curiosos. Según recalcó, en el área metropolitana de Madrid una sola empresa es titular de casi 11 millones de metros cuadrados de suelo, de los que 5,9 millones corresponden a parcelas catastralmente urbanas sin edificar y otros cinco millones a suelo rústico. También relató cómo en la localidad alicantina de Elche una compañía es titular de más de cinco millones de metros de suelo.
El Ministerio de Vivienda lleva más de año y medio trabajando en distintos informes con motivo de la reforma de la ley estatal de suelo, de los que ya desveló en su momento que sólo seis promotoras copaban 145 millones de metros cuadrados de suelo en Madrid y algunas provincias limítrofes, según adelantó Cinco Días el 30 de mayo de 2006.
Esa superficie equivale al 24% de la extensión total de Madrid, supera toda la que se compró y vendió en 2005 y multiplica por diez la extensión de terrenos propiedad del Estado destinados a VPO de 2004 a 2006.
La ministra insistió en defender el modelo de ciudad compacta frente a la urbe dispersa, como se ha hecho tradicionalmente en países como el Reino Unido. Por ello, criticó el anuncio de la presidenta regional de Madrid, Esperanza Aguirre, de no permitir construcciones de viviendas de más de cuatro alturas por su elevado coste en materia de equipamientos, dotaciones e infraestructuras.
De hecho, volvió a citar al área metropolitana de Madrid y a Elche como 'casos paradigmáticos de expansión y dispersión urbanas'. 'Entre 1987 y 2000 la población de esa zona de Madrid se incrementó un 6%, las viviendas lo hicieron casi un 26% y las superficies ocupadas cerca de un 50%', añadió. Por último, defendió que no sólo la subida de los tipos de interés ha contribuido a enfriar el mercado inmobiliario, sino que también lo ha propiciado la política del Gobierno. Además, instó a no hacer caso de los informes elaborados por consultoras privadas por ser 'partes interesadas'.