La inversión en equipo empuja al 4,1% el crecimiento del PIB hasta marzo

La economía española creció un 4,1% en el primer trimestre, una décima más que al cierre de 2006, lo que supone la mejor tasa desde 2001. La inversión en bienes de equipo, que aumentó un 12,1%, compensó la moderación del consumo, mientras que el sector exterior detrajo menos al crecimiento del PIB.

España mantiene el pulso firme de la actividad económica. El producto interior bruto volvió a acelerar entre enero y marzo, hasta el 4,1% interanual (una décima por encima del avance publicado por el INE hace diez días), en lo que supone el decimotercer trimestre consecutivo en el que el crecimiento aumenta o se mantiene.

Pero el primer dato de actividad publicado por el Instituto Nacional de Estadística relativo a 2007 tiene, además, motivos cualitativos para el optimismo. El modelo de crecimiento, tan centrado en la construcción y tan restringido por la demanda externa como ha estado en los últimos años, comienza a mostrar signos de corrección.

La subida de tipos de interés empieza a dejarse notar en el consumo privado, cuyo crecimiento bajó dos décimas, hasta situarse en el 3,5%. No parece, en cambio, afectar a una inversión en bienes de equipo que, alentada por los beneficios empresariales, se disparó hasta el 12,1%, el máximo en los últimos ocho años. La cifra lleva implícita una fuerte confianza de las empresas, lo que puede redundar en que se alargue un ciclo alcista que dura ya 14 años.

Mientras, la inversión en construcción, que ha liderado el tirón económico de los últimos años, suma dos trimestres de desaceleración por el encarecimiento del crédito, pero aún mantiene un impulso del 5,6% que aleja el temor a una crisis en el sector. La edificación sigue moderando su crecimiento, mientras las infraestructuras aceleran. En cuanto al gasto de las administraciones públicas, acelera tres décimas, hasta el 5,2%, coincidiendo con el periodo electoral.

Con estas cifras, España sigue creciendo por encima de la media de la zona euro, elevando el diferencial tres décimas, hasta un punto porcentual. El crecimiento trimestral se situó en 1,1 puntos, su máximo desde 2001. La creación de empleo fue del 3% -aunque sigue centrada en la construcción-, mientras la productividad aumenta su ritmo de crecimiento hasta el 1,1%.

Por el lado de la oferta, y la actividad industrial creció por encima de la construcción (5,1% frente a 4,9%), algo no visto en lo que va de década. En conjunto, industria y energía también se recuperaron seis décimas, hasta el 4,1%. Los servicios, impulsados por los de mercado, mejoraron en medio punto de crecimiento, hasta el 4% interanual, mientras el sector primario apenas creció ocho décimas.

La productividad crece al 1,1%

El primer trimestre del año trajo consigo un incremento de la productividad aparente del factor trabajo del 1,1%, cifra no vista desde mediados de 2001. El crecimiento de la productividad, uno de las cuentas pendientes de la economía, acumula así ocho trimestres seguidos de mejoría.Ese aumento ha sido compatible con una creación de 554.000 puestos de trabajo a tiempo completo, cifra que representa un avance interanual del 3%, una décima menos que en el trimestre anterior. La creación de empleo sigue ligada a la construcción, donde acelera tres décimas hasta un 8,3%. En cambio, la agricultura perdió un 2% de empleos en el último año, y la industria, un 0,3%.

Tirón del beneficio empresarial

El reparto de las rentas registra un sesgo positivo hacia los beneficios empresariales. El excedente bruto de explotación creció un 8,8% interanual en el primer trimestre, un punto y medio más que en el periodo anterior. En cambio, la remuneración de los asalariados creció una décima menos, hasta el 7%. Los salarios todavía representan el 45% de la renta nacional, por un 41% de los beneficios y un 14% de los impuestos. En el primer trimestre, el avance de la remuneración media por asalariado se moderó en tres décimas. El coste laboral por unidad de producto pasa del 2,8% al 2,4%, y se sitúa nueve décimas por debajo del deflactor implícito de la economía (3,3%).