Los expertos abogan por medir el valor que genera el buen gobierno
Los expertos en gobierno corporativo continúan valorando las virtudes y defectos del Código Conthe, que ya este año deben tener en cuenta las sociedades cotizadas. Muchos opinan que el reto ahora es demostrar empíricamente la relación entre buen gobierno y valor del resultado.
Estamos en el momento de la acción. Tenemos un nuevo texto de buen gobierno, que es un código refundido y de consenso, porque incluyó muchas de las críticas y sugerencias de las empresas y otros afectados. Pero ahora el reto es medir científicamente que, efectivamente existe una correlación positiva entre buen gobierno e incremento del valor del resultado y para el accionista'. Así se expresó Aldo Olcese, uno de los integrantes de la comisión de expertos encargada de redactar el Código Unificado, durante la celebración de la jornada Gobierno Corporativo y buenas prácticas, creación de valor para las empresas, organizada por Altadis y El Nuevo Lunes.
En la línea con el principio de autorregulación que respeta el Código Conthe, algunos expertos en buen gobierno como Olcese abogan por el autocontrol a la hora de medir la repercusión del gobierno corporativo. 'La autorregulación no debe vigilarla la CNMV. Debemos dotarnos de elementos de medición privados que legitimen el autogobierno', opina Aldo Olcese.
El decano presidente del Colegio de Economistas de Madrid, Manuel Lagares, abundó en esa idea ya que, en su opinión, es el mercado el que tiene que hacer la evaluación del buen gobierno de las sociedades 'y no la CNMV o el Gobierno'. Por su parte Jesús Lizcano, secretario general de la Asociación Española de Contabilidad y Administración de Empresas (AECA), afirmó que 'la transparencia tiene que ser un objetivo en aras de la equidad social y de la eficiencia económica'. Lizcano opinó además que las sociedades cotizadas aún tienen el reto de publicar sistemáticamente memorias de RSC.
Mientras, el presidente de Deloitte, Carlos González, advirtió de los riesgos que actualmente enfrentan conceptos como la ética, la transparencia e incluso la RSC, entre los que citó la consideración de que la ética es ingenua e inútil en un mundo competitivo, 'la focalización en el corto plazo o la falta de apoyo a los comportamientos éticos de los empleados'.
Los códigos necesitan una sociedad civil vigilante
Antonio Garrigues, que fue uno de los participantes en la mesa redonda organizada para hablar sobre gobierno corporativo y buenas prácticas, señaló que no basta con incorporar códigos como reflejo de lo que han hecho los mercados anglosajones, ya que eso no funciona por sí mismo sin una sociedad civil que los vigile. 'Y en España no disponemos de esa sociedad civil'.Garrigues añadió que en las sociedades latinas las cosas tienden a empeorar porque la tendencia es no medirlas. 'Todo lo que se mide mejora y lo que no se mide, empeora', aseguró y alertó de que en España 'vamos hacia una ética indolora y mercantilizada'.