Rentabilidades jugosas, pero con 15 años de retraso
2006 acapara el 41% del rendimiento logrado por Endesa desde 1992
Un accionista que en 1992 realizase una compra de títulos de Endesa por un valor equivalente a 1.000 euros, habría obtenido por su inversión al cierre de 2006 unos 11.720 euros. Una rentabilidad jugosa, pero que en realidad empezó a materializarse en los últimos dos años y, sobre todo, en 2006. Esa es la conclusión de un estudio realizado por la escuela de negocios IESE, que revela que el 41% del aumento de riqueza para los accionistas proporcionado por Endesa en los últimos 15 años tuvo lugar en 2006. Se entiende por aumento de valor la suma del incremento de capitalización, dividendos y otros pagos, menos todos aquellos desembolsos de carácter dilutivo, como, por ejemplo, las ampliaciones de capital. Entre 1992 y 2006, el aumento de valor de Endesa se cifra en 42.182 millones. De esa cifra, 17.563 millones (41,6%) se crearon el año pasado. Los datos de 2006 suponen más del doble que el segundo mejor año para los accionistas, que fue en 1998, con 7.034 millones.
El gran tirón de Endesa ha llegado justo cuando para los minoritarios es más difícil adquirir acciones de la compañía, ya que en estos momentos, los accionistas mayoritarios tienen el 68,9% de las acciones de la eléctrica.
La rentabilidad media, entendida como el aumento de valor para los accionistas en un año, dividido entre la capitalización, arroja para los accionistas de Endesa un saldo medio del 18,5% durante los últimos 15 años. El dato es inferior al 19,1% que ha ofrecido Iberdrola y del 21,6% de Unión Fenosa. Endesa es, de las tres eléctricas, la que más años negativos ha dado a los accionistas durante el periodo de estudio. Así, la compañía presidida por Manuel Pizarro vivió cinco ejercicios negativos, por cuatro de Unión Fenosa y tres de Iberdrola. La rentabilidad de la primera eléctrica española oscila entre las pérdidas del 34,2% padecidas en 2002 y las ganancias del 87,1% de 1993. El año pasado, la rentabilidad proporcionada por Endesa fue de un espectacular 74,7%.
Un análisis pormenorizado de 120 periodos, que comprenderían de 1991 a 1992, de 1991 a 1993, de 1991 a 1994 y así sucesivamente con todos los años del estudio hasta 2006, pone de manifiesto que Unión Fenosa fue la eléctrica más rentable en 88 de estos periodos, Iberdrola lo fue en 18 periodos y Endesa únicamente en 14.
'Hasta el comienzo de la opa, Unión Fenosa e Iberdrola habían sido sustancialmente más rentables que Endesa', reconoce Pablo Fernández, profesor del IESE y coautor del estudio, junto al profesor José María Carabias. Fernández apunta a un dato significativo, que es el de la rentabilidad por dividendo. De finales de 2001 a comienzos de 2005, la rentabilidad por dividendo de Endesa fue superior al rendimiento del bono español a 10 años. En 2006, de nuevo, el dividendo extraordinario pagado por Endesa hizo que la rentabilidad alcanzase una cota espectacular del 10,8%.
'Cuando la rentabilidad por dividendo de una compañía supera al rendimiento del bono, esto indica que esa empresa está infravalorada', explica Fernández. 'En una situación así, siempre suceden dos cosas. En primer lugar, que la empresa rebaje el dividendo porque es insostenible, o bien, que se ajuste el precio de las acciones y suba la cotización', completa el profesor del IESE.
El baile de Endesa comenzó el 5 de septiembre de 2005, cuando Gas Natural anunció por sorpresa una opa hostil que valoraba la eléctrica en 22.549 millones. Pizarro reaccionó airado y llegó a afirmar que la eléctrica merecería una valoración de 45 euros por título. No ha llegado tan lejos, pero se ha quedado cerca en una guerra marcada por el desembarco ruidoso de actores inesperados. Primero fue la eléctrica alemana Eon, que el 19 de febrero de 2006 presentó una oferta netamente superior a Gas Natural. Pero el 25 de septiembre entró en juego Acciona, comprando el 10% de Endesa y pronto alcanzó el actual 21%.
El 1 de febrero pasado, Gas Natural se retiró de la puja y, cuando todo parecía despejarse para Eon, emergió la italiana Enel, que en cuatro operaciones se hizo con el 24,98% de Endesa. El 29 de marzo próximo se escribirá un nuevo capítulo de esta complicada historia, con la finalización del plazo de aceptación de la opa de Eon. Entre tanto, el precio de las acciones ha evolucionado de 19,09 euros hasta 38,31 euros a los que cerró la cotización el pasado viernes.
Una batalla incierta en la que los minoristas tienen poco más que ganar
¦bull; Los expertos avisan a los inversores minoristas de que la batalla por Endesa ya no es un negocio para ellos. La recomendación es vender o acudir a la opa, donde Eon ofrece 38,75 euros por acción.¦bull; Los grandes ya han sacado beneficio. Endesa ha decidido pagar el incentivo de 0,15 euros brutos que iba a pagar a todos los que acudiesen. Enel se embolsará al menos 35 millones; Acciona, 33 millones; Caja Madrid, unos 15,8 y Axa, 8,5 millones de euros.¦bull; Lo impensable, que es la partición de la eléctrica en varias compañías, comienza a perfilarse en el horizonte como una opción que gana enteros. Enel controla el 24,98% del capital y Acciona, un 21%. Eon, aspira como mínimo a equipararse a sus rivales. Ninguno quiere renunciar a su parte de la compañía.¦bull; La carrera de Endesa aún ha tenido recorrido en 2007. Desde enero, las acciones acumulan una revalorización del 6,9%. Eso sí, el ritmo ha descendido notablemente. Tras la caída del 1,16% sufrida en la sesión del viernes 16, la subida acumulada por las acciones en el último mes de cotización es de un escaso 0,23%.¦bull; Una asociación que representa a los accionistas minoritarios ha reclamado a la eléctrica alemana Eon que asuma su compromiso de mantener la opa, aunque las aceptaciones no lleguen al 50,01%, con el objetivo de que los pequeños inversores puedan deshacerse de unos títulos que tienen pocos visos de reportarles alegrías.