La portuguesa Galp sale al mercado en plena reordenación del sector energético
En una semana está previsto que se cierre el plazo de suscripción de las acciones de Galp que salen al mercado. El Estado pierde el control de la empresa justo cuando el sector en España está en proceso de redefinición.
Un tercio de las acciones de Galp que salen al mercado bursátil ya está cubierto por las solicitudes de los inversores en una oferta pública de venta (OPV) que gana adeptos con el paso de los días. El viento sopla a favor de ella. La petrolera y gasista portuguesa sale a Bolsa y el Estado pierde el control del accionariado en plena batalla por la reordenación energética en la Península Ibérica. Es uno de los atractivos de Galp, pese a que los expertos consideran que tendrá que realizar cuantiosas inversiones para ponerse en línea con otras compañías.
Con esta OPV se sacan directamente al público 82,9 millones de acciones a un precio que quedará fijado entre los 4,55 a 6,12 euros. Otros 90,5 millones se venden a institucionales. El periodo de suscripción concluye el 20 de octubre y el precio final se conocerá el 23 de ese mes. La empresa en principio ha quedado valorada por los bancos que realizan la colocación en unos 4.500 millones de euros. Galp, pese a ser una empresa blindada, ha formado parta estas últimas semanas de casi todas las quinielas de fusiones energéticas.
Si a través de esta OPV el Estado portugués pierde su posición de control, lo que a juicio de los analistas bursátiles es positivo porque le dará más flexibilidad a Galp, no pasa lo mismo con otros socios de referencia. El italiano Eni, primer accionista con un 33,3% del capital, en principio se queda en esta empresa nacida el año 2000 de la fusión de Petrogal y Gas de Portugal. Una estrategia similar seguirá el grupo luso Amorin, que tiene el 31,6%. También se mantendrá la Caixa Geral, aunque sólo tiene el 1% de los títulos.
Este entramado es lo que más preocupa a los expertos, más teniendo en cuenta que estos accionistas han suscrito opciones preferentes de compra en caso de retirada de cualquiera de ellos. No obstante, el auge de los movimientos corporativos creen que se impondrá a medio plazo.
El valor añadido de los grandes socios
Mientras que Repsol ha descartado entrar en Galp en esta OPV e Iberdrola se plantea vender su 5%, surge el interés de otros actores en la toma de posiciones, pese a la fuerte presencia de Eni. Y en medios bursátiles se habla de Gazprom, aunque los rusos se posicionarían de momento en Galp a través de Amorin Energía.