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Banca

La cartera inmobiliaria de la banca crece por primera vez en seis años

El patrimonio inmobiliario de los grandes bancos vuelve a crecer seis años después. El valor de las oficinas, edificios y terrenos que tienen en propiedad las diez mayores entidades en España ha aumentado un 1,82% entre junio de 2005 y junio de 2006, hasta alcanzar un valor de 6.291 millones de euros. Es la primera vez, desde la época de las grandes fusiones, que se incrementa la cartera de inmuebles de la banca.

Miguel Moreno Mendieta

La tendencia a la reducción del patrimonio inmobiliario de los bancos se ha invertido. En los últimos años, ya se había apreciado una moderación en la caída de este tipo de activos: bajó un 10,73% entre 2001 y 2002, mientras que en los dos años siguientes los descensos fueron del 6% y del 0,26%. Completada la era de la consolidación del sector, que acarreó el cierre de oficinas y la venta de edificios emblemáticos, los bancos se afanan ahora en crecer con la apertura de nuevas sucursales, y recuperar el terreno cedido ante las cajas de ahorros en los últimos años.

Las entidades que más han aumentado su cartera inmobiliaria, entre el primer semestre de 2005 y el primero de 2006, fueron Banesto y el Banco de Valencia, con incrementos del 14,4% y del 15,3% respectivamente, según datos de la Asociación Española de Banca.

En ambos casos, el notable ascenso de su patrimonio inmobiliario responde a los ambiciosos planes de expansión emprendidos. Banesto, que aumentó su cartera en 92,5 millones, prevé abrir 140 oficinas en 2006 y quiere alcanzar el 5% de cuota de mercado, desde el 4% actual. Por su parte, el Banco de Valencia quiere triplicar su presencia en Madrid y Barcelona antes de 2009.

Entre los pesos pesados del sector, tan sólo el BBVA ha registrado un incremento en su cartera de inmuebles. El valor de los edificios, terrenos y oficinas del banco presidido por Francisco González aumentó en 43,2 millones de euros, entre junio de 2005 y junio de 2006, lo que supone un ligero avance de 2,1%.

Las principales inversiones del BBVA se produjeron en Madrid. En las proximidades del recinto ferial de la capital, el banco ha comprado varios edificios de oficinas (en total 37.800 metros cuadrados), por 150 millones de euros. El BBVA también adquirió, en abril, nueve edificios de viviendas en el Paseo de la Castellana, por 162,5 millones de euros, en 'la mayor operación de rehabilitación de viviendas llevada a cabo en España hasta la fecha', según la entidad.

Vestigios de otra era

Estas inversiones son ejemplo de una nueva etapa en la cartera inmobiliaria de la banca. Sin embargo, aún quedan vestigios de la era anterior. Uno de los más representativos es la antigua sede del Grupo Santander en la plaza de Canalejas de Madrid, junto a la Puerta del Sol. El banco presidido por Emilio Botín anunció en marzo que había llegado a un preacuerdo con el grupo R&A Palace para vender el emblemático edificio (era la sede del Central Hispano, antes de la fusión). Cinco meses después, aún no ha concluido la operación, que podría aportar al Santander alrededor de 350 millones de euros. El grupo ha obtenido 1.000 millones de ingresos por la venta de los edificios que mantenía en Madrid, tras el traslado del grueso de su plantilla a la nueva Ciudad Financiera, en Boadilla del Monte.

Otro recuerdo de la época de la consolidación del sector es el caso de Barclays. El banco británico, que adquirió el Zaragozano en 2003, aún sigue vendiendo algunas oficinas y edificios a raíz de la integración de ambas redes, y su cartera de inmuebles ha sido la que más se ha reducido, un 17%. En la entidad apuntan una segunda explicación: la política de la matriz es primar el alquiler sobre la adquisición de inmuebles, y hasta la sede central está alquilada. Por este motivo, Barclays vendió recientemente un edificio en Madrid, donde mantenía algunos de sus servicios centrales, que ahora sigue utilizando en régimen de arrendamiento.

El Sabadell ultima la venta de edificios del Urquijo

El Banco Sabadell todavía está digiriendo su última adquisición: el Banco Urquijo. Aunque en el periodo analizado su patrimonio inmobiliario ha crecido casi un 6%, hasta 570 millones de euros, estas cifras no recogen las ventas que ha realizado o va a realizar tras la última compra del grupo.El banco catalán, que integró al Urquijo en sus cuentas a comienzos de julio, ha emprendido un plan de venta de oficinas para eliminar las duplicidades en su red de sucursales. En Madrid aún quedan algunos importantes edificios por vender. Los responsables del Sabadell tienen que decidir si se desprenden de la sede histórica del Urquijo en la calle Príncipe de Vergara (con 10.300 metros cuadrados) o de otro edificio cercano que poseía el banco catalán. El mismo dilema existe con otros dos inmuebles de la calle Gran Vía.Fuera de la capital, la entidad presidida por Josep Oliú también baraja vender dos edificios singulares propiedad del Urquijo: un palacete junto al puerto de Gijón, y un palacio medieval en el centro de Valencia.

Sobre la firma

Miguel Moreno Mendieta
(Madrid, 1979) es licenciado en Derecho y Economía por la Universidad Carlos III. También cursó el Máster de Periodismo de El País. Se incorporó al periódico Cinco Días en 2006, tras pasar por la web de El País y Mi cartera de Inversión. Escribe sobre el sector financiero, con un foco especial en fondos de inversión y los seguros.

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