El Popular defiende su independencia
El Banco Popular lo dejó claro ayer ante sus accionistas, el grupo 'no cree en fusiones entre iguales'. El presidente de la entidad, Ángel Ron, fue tajante al declarar que 'la independencia es una característica distintiva', independencia 'para no ser engullidos por otros'. Pese a estas declaraciones el banco está abierto a compras.
Ron quiso aprovechar su primera junta de accionistas como único presidente del Banco Popular para recordar a su antecesor, Luis Valls, fallecido el pasado mes de febrero, y a su hermano Javier, quien renunció en marzo pasado como copresidente del banco.
Ante un escaso pero importante número de accionistas (hay que tener el uno por mil como mínimo para estar presente en la junta), Ángel Ron recordó que fue Luis Valls quien le introdujo en el consejo del banco y le propuso como presidente. Y como un aviso a navegantes quiso dejar bien claro en la junta que el Popular seguirá manteniendo la misma estrategia que ha seguido desde hace 50 años. El hecho de que la familia Valls haya dejado las riendas del banco no va a alterar la identidad de la entidad.
'La herencia recibida nos obliga, por lealtad y por convicción, a preservar y a potenciar nuestras señas de identidad. Por ello los criterios de independencia, transparencia, discreción, prudencia y fortaleza seguirán impulsando nuestra labor', sentenció el máximo responsable del Popular.
Este recordatorio sirvió a Ron para dar por zanjadas las especulaciones detectadas hace unas semanas que apuntaban nuevamente a una posible fusión del banco con otra entidad, operación a la que no estaría dispuesto el Popular.
El mercado apuntaba al Sabadell como banco que podría intentar una unión con el Popular, algo que ha sido desmentido en varias ocasiones por el grupo que preside Ron.
Pero por si no fue demasiado contundente en la defensa en solitario del Popular, el banquero insistió. 'Nuestras señas de identidad, que se han forjado a lo largo de los últimos 50 años, pueden resumirse en pocas palabras: independencia para no ser asimilados o engullidos por otros, defensa de la solvencia patrimonial, de la rentabilidad y de la eficiencia operacional, tratar de ser los mejores en la asignación de gastos productivos'.
Ron afirmó que en los últimos 20 años se había producido un proceso de concentración bancaria en España, y 'sólo el Grupo Banco Popular mantiene su independencia. La independencia es una característica distintiva del Popular', aseveró.
En respuesta a algunos accionistas que habían realizado sus preguntas por escrito el Popular contestó que no cree 'en las fusiones entre iguales. Por ello cualquier operación corporativa de adquisición o de fusión se plantearía para tomar el control efectivo. Debería generar valor para el accionista en el plazo más breve posible. No debería poner en riesgo el modelo ni la naturaleza del banco y debería generar retornos elevados sobre el capital invertido con riesgo bajo'.
En su discurso ante los accionistas Ron declaró que la independencia no es 'incompatible con estar abiertos a adquisiciones', aunque hasta que pueda aparecer una oportunidad el banco seguirá creciendo orgánicamente. Poco antes recordó que el Popular había realizado ya alguna compra 'para entrar en nuevos mercados o nichos de negocio', y aseguró que el banco mantendrá su apuesta por la banca minorista.
Unos accionistas con vocación de permanencia
Las juntas de accionistas del Popular se caracterizan por el escaso número de accionistas que acuden a las reuniones anuales y por sus pocas intervenciones. En esta ocasión, y como ocurrió en las dos juntas precedentes, sólo un inversor tomó la palabra en directo en el acto. Como es lógico, no necesitó presentarse, toda la cúpula del Popular le conocía. ¡Hola Francisco Lorenzo Belloso!, fue el saludo de la presidencia del banco. Este accionista, primero felicitó y apoyó a los directivos del banco por su buena gestión. Pero más tarde se quejó de dos cosas: del alto porcentaje de participación del capital que se precisa para estar presente en la junta (el uno por mil del capital) y del horario de atención al público de las oficinas bancarias. Pidió que se abriesen las sucursales por las tardes. A pesar de los pocos accionistas que estaban en el acto, el capital presente y representado en la junta ascendía al 56,24%.En la reunión, Ron indirectamente recordó 'la vocación de permanencia' de algunos accionistas del banco. Entre los principales inversores del Popular que se sientan en el consejo están el portugués Americo Amorim, que controla el 6,3% del capital, la aseguradora alemana Allianz, que posee el 9,373%, y la sindicatura, con el 11,6%. En una de las contestaciones que el banco facilita a los accionistas que han recurrido a preguntar por escrito el Popular destaca que la fusión de Unión Europea de Inversiones (UIE), Popularinsa y Bairsa, está dirigida a alcanzar una participación significativa y estable del capital del grupo, y 'refleja la inequívoca confianza de esas sociedades, accionistas relevantes del banco, en la línea de gobierno y cultura corporativa que el Popular mantiene desde hace décadas'.