ACS y La Caixa controlarán la nueva Abertis, gigante mundial de concesiones
La concesionaria española Abertis, controlada por ACS y La Caixa, y el primer grupo italiano de autopistas, Autostrade, sellaron ayer su unión. Los socios españoles dejan en segundo plano a la familia Benetton en la nueva compañía que, además nace con el nombre de Abertis, que protagoniza la fusión por absorción. Tendrán una holgada mayoría con el 33% del capital y el mando en la gestión.
El matrimonio que más de una vez se han planteado Abertis y Autostrade, los dos primeros grupos europeos de autopistas, quedó ayer comprometido. Sus consejos en Barcelona y en Roma, dieron el sí para crear el primer grupo mundial de autopistas. Nace con un valor bursátil de 25.200 millones de euros, ingresos de 6.015 millones, un beneficio bruto de explotación de 3.799 millones y 6.713 kilómetros de autopistas.
La operación se ha fraguado en los últimos meses con mucha discreción. Ambos grupos habían hablado varias veces de crear un gran grupo europeo y hace unos meses retomaron la idea. La noticia saltó el viernes, previa al fin de semana en el que han dado fruto las conversaciones, como avanzó Cinco Días. En estas negociaciones, la familia Benetton (principal accionista de Autostrade a través del holding Schemaventotto, en el que controla el 52,16%) ha cedido peso ante los principales accionistas de Abertis, que controlarán el 33%. ACS y La Caixa (junto con el paquete de la familia Godia) tendrán más de un 13% cada una, detallaron fuentes del grupo español. Ahora cuentan con el 24,83% y el 23,99% de Abertis, respectivamente. A este bloque español se une otro 2,9% de Caixa Catalunya y un 2,8% de Sitreba (Bancaja, su filial Banco de Valencia, la CAM y Unicaja).
Este reparto del capital es posible gracias al 13,3% que tiene Abertis en Schemaventotto que, según el reparto inicial, contará con el 24,9% de la nueva sociedad. Pero a este porcentaje hay que restarle el 3,3% proporcional que corresponde a Abertis y que, en principio, se repartiría entre los tres principales accionistas del nuevo grupo, lo que daría el mayor peso a ACS y La Caixa.
El trámite de la unión está previsto que se materialice a finales de este año
Florentino Pérez, vicepresidente
La familia Benetton y sus socios en Schemaventotto (Fondazione Cassa di Risparmio, Unicredito y Generali) ya habían manifestado su deseo de reducir su participación en Autostrade, en la que desembarcaron cuando se privatizó hace unos cuatro años. Ahora era el momento oportuno para reducir aún más su peso. La solución de acudir a un socio como Abertis, ya ahora el primer grupo europeo de autopistas, ha sido satisfactoria para ambas partes. Se salda con un canje de una acción de Austrade por una de Abertis.
En el organigrama, también hay predominio español porque la gestión del grupo queda en manos del actual consejero delegado de Abertis, Salvador Alemany. Así lo ha propuesto La Caixa, hasta hace tres meses tradicional primer accionista en la concesionaria.
En la cúpula se ha buscado una paridad pero no hay puestos ejecutivos. Habrá dos presidentes, Isidre Fainé (director general de La Caixa que preside Abertis) y Gian Maria Gros-Pietro, (su homólogo en Autostrade), según fuentes conocedoras de la operación. Y el presidente de ACS, Florentino Pérez, que no estaba en el consejo de Abertis, será ahora nombrado vicepresidente. Tendrá un par italiano.
Pero ahí se acaba la igualdad de fuerzas. La sede de la compañía nacida de la fusión estará en Barcelona. Al unirse a Autostrade en lo que Abertis llama una 'fusión de iguales', duplica su valor en Bolsa y puede ser candidanto al selectivo europeo Eurostoxx 50. Dobla, además, su tamaño en autopistas de golpe en su tercera operación en Europa en algo más de un año tras la compra del operador británico de aeropuertos TBI y, sobre todo, del tercer grupo de autopistas francés, Sanef, con socios franceses.
Ahora empieza el trámite para materializar la fusión, que se cerrará a finales de este año, después de que las juntas de accionistas aprueben la operación antes del 30 de junio.
Un dividendo de 2.144 millones a los italianos
Abertis realizará un pago previo de 3,75 euros por título a los accionistas de Autostrade para que la fusión de los dos grupos pueda considerarse de igual a igual. Una vez desembolsado este dividendo, el canje será de una acción de Abertis por otra del grupo italiano. Fuentes de la compañía de infraestructuras que preside Isidre Fainé señalaron que no habrá ampliación de capital para consumar la operación.La participación del 13,3% de Abertis en Schemaventotto se diluirá en dos direcciones. Una tercera parte se venderá a los accionistas minoritarios de Schemaventotto (Unicrédito y Generali) y el restante 8,8% se colocará como autocartera, lo que supondrá un porcentaje del 3% del capital del grupo resultante.Abertis tendrá una deuda de 22.000 millones de euros. Autostrade contaba con un endeudamiento superior a los 8.000 millones al cierre de 2005 y la compra de la francesa Sanef ha aumentado la deuda de Abertis. Por otra parte, el peso del negocio de gestión de autopistas aumentará dentro de los ingresos del grupo, a pesar de la diversificación realizada en los dos últimos años. Tras la compra de los aeropuertos ingleses las autopistas redujeron su aportación hasta el 64% del total, pero la reciente compra de Sanef volvió a incrementar este porcentaje hasta el 77%. La absorción de Autostrade volverá a incrementarlo hasta el 88%.