Los beneficios empresariales sustentan el alza del mercado
Las empresas europeas ganaron 172.446 millones en 2005, un récord histórico, con un aumento del 31%
No es sólo una borrachera de opas. Aunque buena parte de la valoración de muchas compañías tiene que ver con los movimientos corporativos, las cuentas de resultados son todavía un combustible nada desdeñable para sostener las valoraciones bursátiles. El efecto mágico del saneamiento de los balances realizado por las compañías estadounidenses y europeas en años anteriores perdura. Las empresas del Standard & Poor's aumentaron su beneficio casi un 15% y las europeas del Euro Stoxx 50, que engloba a las 50 mayores empresas por capitalización bursátil del área euro, ganaron un 31% más. Nunca en la historia las compañías europeas habían conseguido unos resultados tan espectaculares como los de 2005, con un beneficio conjunto de 172.446 millones de euros que pulveriza el récord histórico de 2000 (144.688 millones de euros).
Será difícil repetir tasas de crecimiento tan llamativas. De hecho, el ritmo de aumento de los beneficios se ha moderado respecto a 2004. La desaceleración ha sido mayor en Estados Unidos que en Europa, algo que venía descontando el mercado y que, probablemente, justifica la menor revalorización bursátil al otro lado del Atlántico. Pero lo cierto es que los analistas de Bolsa creen que hay argumentos suficientes para confiar en que la solidez de los beneficios es sostenible y que, aunque no se verán tasas tan anormalmente elevadas, el ritmo de aumento oscilará entre el 8% y el 10%, todavía por encima de la media histórica de las compañías. 'Lo que se espera es una normalización de la tasa de aumento del beneficio', afirma Jaime Hoyos, director de Gestión de Activos y Patrimonios del Banco Urquijo. 'El mercado sabe que habrá una desaceleración de los beneficios, que no significa que caigan, sino que se aproximan a ritmos más acordes con su media histórica', explica Pedro Mirete, responsable de análisis de Ahorro Corporación.
Los analistas creen, por tanto, que incluso si se pasa la fiebre de las opas, que hoy por hoy altera en cierto modo el precio de las acciones, no hay motivos, de momento, para salir de la renta variable, a menos que empeoren las expectativas de inflación y la subida de los tipos vaya más lejos de lo deseable. 'Si se cumplen las previsiones, seguiríamos hablando de un crecimiento fuerte que apoyará la subida de las acciones', asegura Natalia Aguirre, de Renta 4.
'Asistiremos en los próximos meses a revisiones al alza en la estimación de resultados', según los analistas
Los expertos creen, incluso, que se pueden mejorar las previsiones al alza de los beneficios de las grandes compañías si se consolidan los signos de recuperación económica. 'Si la economía se comporta mejor, como parece, las ventas van a tener ritmos de crecimiento muy interesantes', asegura Fernando Hernández, analista de Inversis. 'Asistiremos en los próximos meses a una revisión al alza de las estimaciones', señala Ana Maymús, de Sabadell Banca Privada.
Javier Estrada, director de Inversiones de Morgan Stanley, cita incluso lo que considera que son razones estructurales de un posible 'nuevo paradigma económico' en el que los beneficios de las empresas 'pueden mantenerse altos durante mucho tiempo'. Entre esas razones habla de una combinación de deslocalizaciones, avances tecnológicos y menor presión de los costes laborales.
En España, las grandes compañías rebosan satisfacción y lejos de impresionarse por las espectaculares cifras obtenidas en 2005 auguran que continuarán en los próximos ejercicios. Santander, que en 2005 ganó un 72% más tras integrar Abbey, prevé que la mejora del beneficio en 2006 se sitúe en el 20%. Telefónica, por su parte, anticipa un alza en los ingresos de entre el 34% y el 37%, con una subida en el resultado operativo entre el 26% y el 30%. En el caso de Endesa, sus actuales gestores se han comprometido a que el Ebitda crezca a una tasa anualizada de entre el 10% y el 11% en el periodo 2004-2009.
En cuanto a Europa, la relevancia de las cifras obtenidas por los principales blue chips es aún mayor si se tiene en cuenta que parten de una base comparativa muy exigente, ya que en 2004 los beneficios ya crecieron un 57% con respecto a los de 2003. Las cifras del pasado ejercicio confirman que las compañías europeas están muy lejos de la espiral bajista de beneficios que comenzó en 2001 y que tuvo su momento álgido en 2002, cuando el Euro Stoxx 50 se tiñó de rojo, con unas pérdidas conjuntas de 16.352 millones debido a los costosos saneamientos y provisiones que tuvieron que acometer muchas empresas.
El fuerte crecimiento de las ganancias en 2005, sin embargo, exige una mirada más detallada. Hay que tener en cuenta que en muchos casos ha estado impulsado, no tanto por la evolución del negocio orgánico, como por dos factores extraordinarios. El primero de ellos tiene que ver con las plusvalías que han obtenido con las desinversiones, máxime en un mercado alcista como el del pasado año. El segundo factor está relacionado con los movimientos corporativos, al ampliar, en ciertos casos, los perímetros de consolidación, por lo que se hace difícil la comparativa interanual.
Así, aunque las otras partidas de las cuentas de resultados ofrecen crecimientos dignos, están por debajo del ritmo del 31% al que mejoraron los beneficios. La facturación conjunta de las empresas del Euro Stoxx en 2005 crece un 8,7%, hasta los 1,8 billones, mientras el resultado de explotación, que refleja la evolución básica del negocio empresarial, se sitúa en 272.136, un 11,5% más.
La mejora de los beneficios ha sido generalizada entre las empresas del índice y 34 de ellas han obtenido crecimientos en sus ganancias superiores al 20%. Además, ninguna cerró el ejercicio en pérdidas y sólo tres compañías vieron retroceder sus ganancias con respecto a 2004. Antes del inicio de la campaña de resultados el mercado estaba muy pendiente de las cuentas de las telecos, ya que se temía alguna revisión a la baja. Estas empresas, sin embargo, han cumplido las previsiones y, en algunos casos, los beneficios han estado por encima, con un ritmo de mejora medio del 58%. Les sigue el sector eléctrico, donde el resultado neto en 2005 ha mejorado de media un 54,4%, consumo (54%), banca (36%) y seguros (34%).
El fuerte tirón de los beneficios permite que, a pesar de tres ejercicios alcistas para las Bolsas, la valoración de las compañías no se encarezca. Así, mientras el PER del Euro Stoxx 50 en 2004 fue de 16,7 veces, en 2005 esta ratio se situó en 15,8 veces. En 2006, el PER de consenso de mercado para el índice se sitúa en 14,6 veces.
El diferencial entre EE UU y Europa se estrecha
Como ya sucediera en los últimos dos años, los índices bursátiles europeos lo están haciendo mejor que los estadounidenses en el arranque de 2006. Sin embargo, cada vez son más voces las que avisan de que el diferencial de valoración entre los mercados a ambas orillas del Atlántico se está acortando y que el mejor comportamiento de las Bolsas europeas frente a Wall Street puede moderarse.El último en apuntarse a esta opinión es Goldman Sachs. En un informe fechado el 10 de marzo, Peter Oppenheimer y su equipo señalan que aunque el potencial de mejora de la economía europea y las operaciones corporativas está sirviendo de sostén a los mercados, 'las subidas de tipos por parte del BCE, un euro potencialmente más fuerte que el dólar y unas valoraciones menos atractivas que hace unos años puede suponer un freno para su potencial de subida en el corto plazo'.Este banco de inversión cree que el euro puede apreciarse de nuevo (prevén un tipo de cambio de 1,25 dólares) y recuerda que por cada 10% que se revaloriza la divisa la rentabilidad de las compañías europeas cae un 4%.Goldman Sachs mantiene su previsión de subida para la Bolsa europea este año en el 11%. A medio plazo se mantienen optimistas con respecto a la Bolsa alemana, 'sin embargo, a corto plazo recomendaríamos reconducir parte de la exposición a Europa hacia la renta variable británica'.En su informe, Goldman Sachs destaca que la valoración en términos de PER de la Bolsa europea es actualmente la misma que la estadounidense. 'Sin embargo, no vemos que los valores europeos vayan a comportarse significativamente peor hasta que los tipos y el dólar empiecen a caer'.
El atractivo del sector bancario
El sector bancario es el favorito de los expertos en Europa. Entre los 15 valores más recomendados del Euro Stoxx 50, cinco son bancos (ING, BNP Paribas, BBVA, ABN Amro y Deutsche Bank), según datos de consenso de mercado de JCF.Los analistas señalan que los bancos seguirán gozando en 2006 de un buen ritmo en el crecimiento de sus resultados, aupados por unos volúmenes de negocio fuertes y por un escenario alcista de los tipos de interés que incrementa sus márgenes. Además, los expertos recuerdan que las valoraciones de estas entidades son todavía atractivas y que se pueden beneficiar de futuros movimientos de concentración.Después del bancario, los sectores más representados en la lista de favoritos son seguros (Allianz y Axa) y petróleo (Total y Eni). En el caso de este último, los analistas señalan que aunque se produzca una caída en el precio del crudo, el flujo de caja de las petroleras seguirá siendo muy elevado.A título individual, el valor favorito de los expertos, de acuerdo a las recomendaciones recibidas, es Vivendi. El segundo valor más recomendado es Eon. La eléctrica alemana, que recientemente ha lanzado una opa sobre Endesa, es la única utility dentro de esta clasificación. Los analistas consideran que la fuerte subida experimentada por las eléctricas en los últimos meses las dejan sin demasiado potencial de subida. Además, recuerdan que son bastante sensibles a los ciclos alcistas de los tipos.