Hipotecas a la carta

Aunque los expertos llevan tiempo vaticinando el final del boom hipotecario, el filón, de la mano de la pujante construcción residencial, parece no agotarse. La elevada tasa de inmigración y algunas señales de moderación del precio de la vivienda son dos factores que pueden prolongar aún más este proceso. Pero es de sentido común considerar que un crédito hipotecario que lleva más de una década en franco crecimiento, con tasas sobradamente por encima del 20% en los últimos años, se encamine a la moderación. Por eso hacen bien las entidades financieras al reorientar su estrategia con productos novedosos. Algunos de éstos ya están en el mercado y otros se cocinan en estos momentos en los bancos y las cajas, en previsión de subidas de tipos de interés. Todo indica que la tendencia se orienta hacia la hipoteca individualizada, a la medida de cada cliente, con cuotas más flexibles. Es una saludable y previsora vía para la banca, que tendrá más sentido si se diseña pensando en el cliente.