La economía española crece más del doble que la de la zona euro
La economía de la UE no acaba de despegar. Cerró el año 2005 en plena desaceleración, con un crecimiento del 1,6%, ocho décimas menos que el ejercicio anterior (2,4%). Dentro del área, la zona euro también se resintió con un aumento del PIB de sólo el 1,3%, otras ocho décimas menos frente al 2,1% de 2004. España, a otro ritmo, crece al 3,4%, entre dos y tres veces la media de la Unión Monetaria.
Los datos, preliminares aún, los ofreció ayer la agencia comunitaria de Estadísticas, Eurostat, mientras los titulares de Economía y Finanzas de la UE se reunían en el Consejo de Ministros de Finanzas (Ecofin) en Bruselas. Aunque Eurostat todavía no dispone aún de datos desagregados de todos los países, sí vislumbra un comportamiento bipolar entre los nuevos miembros del Este del continente al que se suma España, en plena expansión, y la situación de las principales economías del área (Alemania y Francia). En el caso de Alemania, el PIB germano apenas aumentó un 0,9% en todo el año, rozando el estancamiento por la falta de fuerza en su demanda interna, que no en el sector exterior (tuvo récord de exportaciones).
Francia, el otro gran bastión económico de peso en la UE, está algo mejor que la economía germana pero igualmente en fase descendente (creció sólo un 1,4% el año pasado). España, en cambio acelera su crecimiento del 3,1% al 3,4%, por la fortaleza del consumo y la inversión. Los ministros de Economía, encabezados por el titular de Finanzas austriaco, Karl-Heinz Grasser (presidente del Ecofin), reconocieron que los datos del cuarto trimestre de 2005 en la UE han sido 'decepcionantes', ya que se esperaba una fuerte recuperación que, al final, no se ha conseguido (el PIB sólo aumentó un 0,4% intertrimestral). No obstante, Grasser mantiene el 'optimismo' para este año, 'por lo que se sabe hasta ahora' de enero y febrero.
Subida del precio del dinero
El Eurogrupo demanda seguir con tipos de interés bajos para ayudar a que se consolide la recuperación
En las mentes de los ministros pesó durante la reunión la alta probabilidad de que el Banco Central Europeo (BCE) suba de nuevo los tipos de interés en la zona euro (están en el 2,25%) en su próxima reunión del 2 de marzo, tal y como ha sugerido en los últimos días su presidente, Jean-Claude Trichet.
Aunque los políticos destacaron que una nueva y reducida subida de tipos no iba a cambiar mucho las circunstancias por las que atraviesa la zona, sí reconocieron que el BCE juega un papel importante para la reactivación de la UE con el manejo de la política monetaria. Jean-Claude Juncker, ministro de Luxemburgo y presidente del Eurogrupo (formado por los titulares de Economía de la zona euro), indicó ayer que espera del próximo Consejo del BCE una 'decisión responsable' sobre los tipos de interés, de forma que ésta no afecte a la recuperación económica en curso. En la reunión del BCE de diciembre, los ministros de Finanzas también sugirieron a Trichet que no subiera los tipos, recomendación que no siguió, justificándola por las tensiones inflacionistas existentes. Ayer, Juncker matizó, no obstante, que la recuperación sigue su curso en Europa a pesar de la inflación y la escasa demanda interna y pese a que el crecimiento no se está produciendo no con la misma intensidad en todos los países y sectores.
El INE destaca que la economía española reduce el desequilibrio con el sector exterior
No cabe duda de que España es, en estos momentos, un oasis en la renqueante economía europea. El Instituto Nacional de Estadística (INE) dio ayer por buenos los pronósticos del Banco de España que hace una semana ya estimaban para la economía española un crecimiento del 3,4% de media para todo 2005, por encima de lo cosechado en los tres ejercicios anteriores y dos puntos más que la media comunitaria.El PIB ha crecido en el último trimestre incluso algo más que la media anual, al 3,5%, a igual tasa como en el tercero, y dos décimas más que en el primero.El INE destacó, además, que el crecimiento de la economía española 'muestra una estabilización, resultado de una contribución menos expansiva de la demanda nacional y una aportación menos negativa del sector exterior'. Habrá que esperar al 22 de febrero (cuando se hagan publiquen los datos desagregados de contabilidad nacional) para comprobar en qué medida se ha reducido este desequilibrio a final de año.Los datos del INE fueron recibidos ayer con agrado por parte de Pedro Solbes, vicepresidente económico del Gobierno, poco antes de asistir a la reunión del Ecofin en Bruselas. Solbes recalcó, precisamente, la 'moderación' de la demanda interna y la mejora del sector exterior. En los últimos meses, el Gobierno ha sido criticado por partidos políticos, sindicatos, patronal y el propio Banco de España por el desequilibrio existente en la economía, basada en gran parte en el sector de la construcción y el consumo privado, y en detrimento de las exportaciones.Solbes destacó, no obstante, la necesidad de seguir con las reformas económicas planteadas, no sólo en España sino en el resto de países de la UE. A esta idea se apuntó Jean-Claude Junker. El ministro luxemburgués insistió en que los países del euro deben continuar con la consolidación (equilibrio) de sus finanzas públicas y hacer un esfuerzo en inversión en I+D para dar al crecimiento una base más sólida y permanente de lo que ocurre hasta ahora.Por su parte, el comisario para Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, recalcó el efecto negativo sobre la economía europea de los elevados precios del petróleo, en una región muy dependiente de las materias primas importadas de Oriente Medio y el resto de países de la OPEP. Otros factores de riesgo, aunque menores por el momento, son una extensión de la gripe aviar a la población humana, posibilidad controlada por el momento con los férreos controles sanitarios. A pesar de todo, Almunia sigue confiando en que el crecimiento de la zona euro se acelere este año hasta unas tasas cercanas al 1,9% (seis décimas más que en 2005).