Quince reformas más en lista de espera
El Estatuto valenciano será aprobado de forma definitiva por el Congreso en, aproximadamente, mes y medio y, con posterioridad, le tocará el turno al catalán, en estos momentos en trámite de ponencia. Después llegará a Madrid la reforma andaluza, la canaria y la balear, en las que los principales partidos tratan de ponerse de acuerdo en lo sustancial para asegurarse una tramitación sosegada en Madrid.
También han iniciado los trabajos para reformar sus estatutos las comunidades de Aragón, Navarra, Asturias, Galicia, Castilla y León, Murcia, Castilla-La Mancha, Extremadura, Cantabria y La Rioja. Menos pacíficas se prevén las reformas de Madrid, donde el PP y el PSOE mantienen serias discrepancias, y la del País Vasco, un proceso ligado al proceso de paz. En total, son quince las reformas que están en lista de espera, aunque Ceuta y Melilla también han expresado su deseo de cambiar sus respectivos estatutos de autonomía.
Tras el rechazo del llamado plan Ibarretxe en el Congreso de los Diputados, la reforma vasca ha quedado en suspenso, a la espera de que la Mesa de partidos que ha propuesto el lendakari Juan José Ibarretxe se reúna y comience a trabajar en un nuevo proyecto de reforma.
Está previsto que dicha Mesa sea convocada una vez que ETA declare una hipotética tregua, momento a partir del cual Zapatero pediría la autorización del Congreso para negociar con la organización terrorista. En las previsiones está, pues, el funcionamiento de dos mesas que trabajarían en paralelo, una de ellas volcada en la elaboración de un nuevo Estatuto.