La apuesta de KLM
Las grandes líneas aéreas parecen dispuestas a hacer la competencia a las empresas de bajo coste en su terreno. Al menos, ése es el camino que inició ayer una de ellas. La holandesa KLM, hoy integrada en el grupo Air France, rebajará a partir del 1 de enero un 40% los precios de su rutas europeas. La compañía prevé mantener este recorte, el mayor de su historia, durante todo 2005. Las aerolíneas de todo el mundo, muy especialmente las estadounidenses, aún renquean desde la espectacular crisis que sufrieron tras el 11-S, agravada con la agresiva irrupción de las líneas baratas. Todos los grupos se afanan ahora en superar el mal trago y recuperar la rentabilidad perdida. La propia integración de KLM en Air France es un ejemplo de ello. La medida anunciada ayer, otro. Iberia, que se apresuró a aclarar que no entrará en la política de tirar precios, también tiene clara su apuesta: British Airways.