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Cine

Time Warner entra en negociaciones para la compra de los estudios MGM

Sony tiene competencia. Time Warner prepara una oferta para comprar los estudios de cine Metro Goldwyn Mayer puestos a la venta, por cuarta vez, por su primer accionista, el inversor Kirk Kerkorian. La empresa japonesa y otras dos entidades de capital riesgo llevaban cuadrando desde abril una oferta que valora los estudios en unos 5.000 millones de dólares. La oferta que ultima Time Warner es de menor cuantía, pero da entrada a Kerkorian en su accionariado.

Time Warner está considerando ofrecer al primer accionista de MGM, el inversor Kirk Kerkorian, un intercambio de acciones valorado en 11,5 dólares por título y 13 dólares en dinero al resto de los accionistas. El valor del acuerdo se acercaría a los 4.800 millones de dólares, ya que se asumirían 1.900 millones en deuda, y está por debajo de lo que ofrece inicialmente Sony. No obstante, Kerkorian está presionando al presidente de Time Warner, Richard Parsons, para que suba su propuesta hasta el límite de los 5.000 millones.

La oferta sigue abierta y puede experimentar aún muchas modificaciones, decían The New York Times y Wall Street Journal, quienes informaron ayer del movimiento de Time Warner. En Wall Street se comenta que a Kerkorian, propietario del 74% de MGM, le gusta pensar en la posibilidad de convertirse en uno de los grandes accionistas de Time Warner.

La lucha por hacerse con los estudios MGM, que tienen los derechos de la saga James Bond y la Pantera Rosa entre los más de 4.000 títulos de su videoteca, podría tener un frente más con la incorporación de NBC. Esta filial de General Electric consideró interesante hace meses la compra de MGM y de hecho, ha firmado un acuerdo de confidencialidad para tener derecho a estudiar su documentación. No obstante, los ejecutivos de NBC creen que el precio que Sony está dispuesta a pagar es muy alto. No se descarta, sin embargo, que presenten una oferta.

Con o sin GE, la batalla por MGM ha ganado interés. Time Warner puede inyectar algo de prisa a las negociaciones que mantiene Sony con sus futuros socios, Texas Pacific Group y Providence Equity Partners, para cerrar los flecos de la oferta. En MGM hay una cierta frustración por la lentitud de los japoneses, propietarios de los estudios Columbia y TriStar, quienes hasta hace poco tiempo tenían los derechos exclusivos de la compra.

MGM llegó incluso a retrasar la junta de accionistas con la esperanza de poder ofrecer a sus inversores al menos un avance del acuerdo de venta.

Pero esto no ha ocurrido aún. Sony ha completado las diligencias previas, pero aún está revisando los aspectos contractuales de su propuesta. Así las cosas, MGM abrió el proceso a otras ofertas, además de mantener la segunda fecha de la junta que se celebró el martes sin esperar más a los japoneses. En ese foro, Alex Yemenidjian, su consejero delegado, dijo que la empresa tenía 'más alternativas estratégicas de las que se suponían en un principio', dando pistas sobre el interés de Time Warner.

Que la empresa de Parsons está dispuesta a comprar muestra el cambio de ciclo en el gigante de medios, que da así muestras tangibles de que se recupera de la traumática fusión con AOL. Parsons ya ha pisado el freno en la política de ventas puesta en marcha para devolver la deuda a niveles aceptables y ha avanzado una estrategia de compras de momento sólo dibujada.

Time Warner ha mostrado ya interés en la compra de Adelphina para ampliar su negocio de cable para televisión. Pero Time Warner no tiene las manos libres. Aún tiene que solventar una delicada situación con el regulador de los mercados que investiga la presunta manipulación de las cuentas de AOL que hicieron posible la fusión.

Kirk Kerkorian, el verdadero señor del anillo

Warner, uno de lo estudios de cine de Time Warner, ya tiene experiencia con MGM porque ha tenido la ocasión de distribuir parte de su ingente contenido. Además, a la empresa presidida por Richard Parsons le vendría muy bien la compra de la de Kirk Kerkorian para seguir sacando rendimiento cinematográfico de la producción literaria de J. R.R. Tolkien, autor de El Señor de los anillos, una trilogía cinematográfica que ha generado 2.900 millones de dólares de ingresos por taquilla en todo el mundo. La serie de tres películas producidas por New Line Cinema, propiedad de Time Warner, ha sido una importante fuente de ingresos, pero el libro y la película llegaron al definitivo The End con El retorno del rey. Según la agencia AP, desde New Line se contemplaba la posibilidad de seguir manteniendo viva la historia con el rodaje de la historia que da origen a la saga, El hobbit, pero la mayoría de los derechos mundiales de la historia que narra las aventuras de Bilbo son propiedad de MGM. Kerkorian es, en puridad, el dueño y señor de esta historia del anillo que tan buen rendimiento ha dado a una empresa que necesita un gran éxito en las pantallas para equilibrar los resultados de su división de cine con los de ejercicios precedentes.

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