El sector del motor pide al Gobierno ayuda para evitar fugas de empresas

El nuevo presidente de la patronal de los fabricantes de coches no desaprovechó su primera intervención ante los medios. Juan Antonio Fernández de Sevilla se dirigió ayer directamente al nuevo Gobierno, a quien culpó, junto a su antecesor, de no prestar la ayuda que debiera. El directivo pidió al Ejecutivo que 'haga sus deberes' para mejorar la 'poco menos que ridícula' rentabilidad del sector.

Los datos que maneja la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) parecen justificar los calificativos usados por también el presidente de Renault España. Desde 1999 hasta 2003, el ratio de beneficios sobre facturación de la industria del automóvil en España ha pasado de un 1,7% a un 0,7%, 'de las menores rentabilidades de la industria'. Y la situación, añadió, aún puede seguir empeorando.

La culpa de estas bajas cifras está repartida. Fernández de Sevilla admitió ayer que el sector presenta un margen muy estrecho, y que tendrían que hacer algún esfuerzo en ese sentido. Sin embargo, el portavoz de los fabricantes cargó las tintas sobre todo sobre la Administración.

'El del automóvil', declaró, 'es un sector maduro que ha hecho sus deberes en el terreno industrial, laboral y comercial. Ahora le toca a la Administración hacer los suyos' para garantizar la competitividad, las inversiones y el empleo del sector, ante el 'evidente' riesgo de deslocalización al que se enfrenta.

Como pruebas del deber cumplido por parte de los fabricantes, el directivo barcelonés indicó que el sector del automóvil está registrando 'máximos históricos', cuenta con 'empresas competitivas' y tiene un 'clima laboral' mejor que el de otros países fabricantes, fruto de los convenios firmados este año que garantizan la 'paz social' durante un período de cuatro años y ofrecen una moderación salarial con una subida media del IPC más el 0,4%.

Vista la situación, y una vez que 'todos los agentes' han hecho un 'esfuerzo', ahora le toca el turno a la Administración. El presidente de Anfac espera un cambio con el Gobierno del PSOE, al que pidió un marco regulatorio adecuado que haga atractiva la inversión en I+D+I, una mejora de la fiscalidad y las infraestructuras y que la adopción de la normativa laboral a las necesidades específicas del sector.

En este sentido, el directivo recordó que esta industria cuenta con 'peculiaridades' que la diferencian de otras actividades. Así, Fernández de Sevilla recordó que la temporalidad en las fábricas llega 'escasamente al 10%', un a cifra 'insuficiente', e instó al Gobierno, tal y como hicieron sus antecesores en el cargo, a regular el marco laboral para evitar fugas de empresas. 'Garantizar la paz social es muy importante para evitar la deslocalización. El riesgo de deslocalización existe'.

A pesar de sus amonestaciones a la Administración, De Sevilla se felicitó de la decisión de rescatar al Ministerio de Industria, a cuyo titular ofreció 'diálogo' y 'apoyo'.

Industria. Mejora la productividad tras caer el 2% el empleo directo

La productividad de los empleados mejoró en más de tres puntos porcentuales con respecto a 2002. Así, el número de coches fabricados por cada trabajador pasó de 39,4 a 42,7.En esta mejora confluyeron dos factores. Por una parte, el récord de producción en las 18 plantas españolas. Por otro, el hecho de que el empleo directo ha caído el 2% el empleo directo hasta 71.038 personas. El 10,5% de la masa laboral en España trabaja en el sector.La aportación de la industria al PIB nacional mejoró en un¡a décima, del 5,7% al 5,8%. El sector de los coches copa el 23,6% de las exportaciones españolas, y el 17,7% de las importaciones.El parque total de vehículos ha pasado de 22,31 millones en el ejercicio 2001 a 23,72 millones en 2003, el 3% más que en 2003.

La producción total cae el 1,8% hasta mayo

El récord de producción alcanzado durante el ejercicio 2003 -con 3,029 millones de unidades- no se está repitiendo este año, al menos por el momento. La fabricación alcanzó 286.300 unidades en mayo, lo que supone una disminución del 0,6%.En lo que va de año, la caída es ligeramente mator, ya que ésta alcanza el 1,79% tras salir de 1,33 millones de vehículos de las 18 plantas españolas. El principal motivo para este descenso, según fuentes del sector, es la relativa atonía en la que siguen inmersos los principales mercados europeos, como el alemán. Esto afecta a las plantas en España, que exportaron el 0,17% más en los cinco primerpos meses del año. Con este alza, el 81,3% de la producción que salió en en mayo viajó a otros países. En el acumulado, la ratio cae al 79,8%.Estos datos consolidan a España como el tercer país productor de Europa y el séptimo mundial, si son contabilizados sólo los turismos y octavo si se incluyen vehículos industriales.

Vuelta a los beneficios tras ganar 292 millones

El pasado ejercicio aportó varias buenas noticias al sector, según la memoria anual de Anfac. La primera de ellas fue la recuperación de las ventas que se experimentó a partir de mayo. Pero más importante fue el retorno a la rentabilidad. Los fabricantes en España ganaron 292 millones en el ejercicio, frente a las pérdidas de 19 millones en 2002. Esta recuperación se dio, en gran medida, gracias al esfuerzo inversor del sector, según Fernández de Sevilla. Este apartado se llevó 1.519 millones en 2003, el 23,8% menos. La rentabilidad, aun así, sigue por los suelos. El beneficio sobre facturación se situó en un 'poco menos que ridículo' 0,7%, que, no obstante, mejoró la tasa negativa de 2002.Según Anfac, la industria aportó 21.116 millones al Estado por impuestos sobre el automóvil y los carburantes, lo que supone un incremento del 5,6%. Por ello, el presidente solicitó ayer al Gobierno 'que reinvierta en el automóvil lo que el automóvil genera'.