Kirchner acusa a Repsol de 'extorsionar' a Argentina
El enfrentamiento entre el Gobierno argentino y las petroleras, a las que responsabiliza de la crisis energética que sufre el país, se agudiza. Su presidente, Néstor Kirchner, las acusó ayer de 'extorsionar' al Ejecutivo 'tapando pozos' para conseguir mejores tarifas. El principal productor de gas, Repsol YPF, asegura que ha invertido 900 millones de dólares desde 2001 y achaca la crisis a la fuerte demanda derivada de la recuperación económica.
Cuando el enfrentamiento entre el Gobierno de Néstor Kirchner y las petroleras parecía haberse aplacado, tras el pacto alcanzado para una progresiva subida de las tarifas del gas, el presidente argentino ha vuelto a avivar el fuego. Ayer, en una conversación con el economista Paul Krugman en Nueva York que recoge la prensa argentina, Kirchner volvió a acusar a las petroleras, especialmente a Repsol, que produce casi el 50% del gas natural del país, de no haber realizado las suficientes inversiones en exploración como para atender los incrementos de la demanda. 'Me extorsionan y taparon los pozos. Me piden más precio a cambio de mayor volumen y yo les digo que me den más volumen y les doy más precio', subrayó Kirchner. El precio del gas a pie de pozo en Argentina es un tercio del promedio internacional
En la parte que le corresponde, un portavoz de Repsol reitera que, pese al derrumbe de los precios tras su pesificación en 2001, 'la compañía ha mantenido el ritmo de las inversiones en exploración en el país'. Concretamente, 900 millones de dólares desde 2001, de los que 250 millones se ejecutaron el año pasado. Esto se tradujo, según Repsol, en un aumento de la producción del 18% el año pasado, 52,2 millones de metros cúbicos diarios en 2003, sin incluir las exportaciones.
Sin embargo, el Gobierno argentino siempre ha sostenido que la crisis energética que sufre el país es consecuencia directa de la falta de inversiones por parte de las petroleras. De hecho, en sus declaraciones de ayer Kirchner recordó que 'Repsol obtuvo 2.600 millones de pesos de ganancias en el último ejercicio'. Y le reprochó: ¿Así que no han tenido dinero para hacer inversiones? Es una falta de respeto'.
Los productores achacan la crisis al fuerte incremento de la demanda de un combustible demasiado barato
La demanda crece un 24%
Se calcula que el déficit de gas, en un país en el que un 55% de la energía primaria se genera con este combustible, rondará los 24 millones de metros cúbicos diarios en el invierno que está a punto de comenzar, tres veces por encima del desfase registrado en esa misma estación en 2003. La crisis se agudizó en marzo y abril, meses en los que la industria (entre ellas, la eléctrica) sufrió cortes por 14 millones de metros cúbicos y se extendió a Chile, tras la decisión del Gobierno de reducir las exportaciones de gas al país vecino.
En Argentina, Repsol compite en la extracción de gas con grandes multinacionales, como Texaco, Chevron, BP o Petrobras, y multitud de pequeños productores. Y, aunque entre las empresas se reconoce que las inversiones se han ralentizado, achacan la crisis a la fuerte demanda de gas en el país, como consecuencia de la recuperación económica (para este año se espera un crecimiento del PIB del 6%) y del uso masivo de un combustible barato. La demanda, que creció un 12% el año pasado, se ha incrementado en el primer trimestre otro 24%. En Repsol consideran que también hay un problema de transporte (hay gasoductos al 100% de su capacidad) y que, en su caso, la producción en ese trimestre creció un 33%, muy por encima de la demanda.
La crisis se agudizará en invierno
La crisis del gas argentino, derivada de un desbordamiento de la demanda que la oferta no consigue cubrir, ha llamado especialmente la atención por producirse en un país que dispone de una de las mayores reservas gasísticas del mundo. Los expertos calculan que sus efectos pueden detraer un punto al crecimiento económico previsto para este año y avivar la inflación. El Gobierno ha tomado medidas coyunturales para ahorrar la mitad del déficit previsto para el invierno.1 Importar y exportar. Se importarán cuatro millones de metros cúbicos al día de Bolivia. Repsol está acondicionando el gasoducto boliviano, fuera de uso desde 2000. Por contra, se han reducido las exportaciones a Chile, que las petroleras cobran en dólares.2 Recuperar el fuel. El Gobierno está incentivando (o subvencionando) el uso de combustibles líquidos en las centrales eléctricas. Los productores de gas han criticado a las eléctricas por sustituir el fuel por gas en sus centrales de ciclo combinado, debido a los bajos precios.3 Plan de ahorro. Se ha establecido un sistema de 'premios y castigos' para incentivar el ahorro y se va a incrementar el precio del GNC, el gas para coches, que es tres veces más barato que la gasolina. Su incentivo fiscal en los últimos años ha hecho que el parque de automóviles con convertidor de gas haya crecido un 35%.