Welteke cede a las presiones políticas y deja el Bundesbank
El presidente del Bundesbank alemán, Ernst Welteke, dimitió ayer por el escándalo de las invitaciones del banco germano Dresdner Bank, que pagó al banquero y a su familia una estancia de cuatro noches en un lujoso hotel berlinés. Welteke, que había sido apartado de su puesto temporalmente el pasado 7 de abril, dijo que la relación de confianza entre él y el Ministerio de Finanzas 'ha quedado dañada de forma irreparable'. 'No quiero perjudicar la integridad del Bundesbank', añadió.
Welteke, su esposa, dos de sus hijos y la novia de uno de ellos pernoctaron cuatro días en el Hotel Adlon de Berlín invitados por el Dresdner Bank, que organizó una fiesta con motivo de la introducción de los billetes y monedas de euro en enero de 2002. La factura ascendió a 7.661 euros. Como funcionario público, Welteke no puede aceptar invitaciones de un banco privado cuya vigilancia y control está, además, en manos del Bundesbank. Después de que la prensa alemana destapara el escándalo hace dos semanas, el banquero devolvió el dinero y aceptó una suspensión temporal de su puesto, pero su imagen había quedado ya irremediablemente dañada.
El Ministerio alemán de Finanzas, que en la última semana ha insinuado casi a diario que Welteke debería dimitir, ha mostrado 'respeto' por la decisión del banquero. El sucesor del presidente del Bundesbank se designará 'en un tiempo y forma adecuados', añadió el ministerio. El candidato con más posibilidades es el secretario de Estado de Finanzas, Caio Koch-Weser.
Sin embargo, fuentes del Bundesbank citadas por Reuters señalaron que Koch-Weser no cuenta con apoyos suficientes en la entidad y el sector financiero para hacerse con el puesto. Junto al secretario de Estado de Finanzas se barajan también los nombres del secretario de Estado de Economía, Alfred Tacke, y del vicepresidente del Bundesbank, Jürgen Stark, que asumió provisionalmente la presidencia de la entidad la pasada semana. Como gobernador de un banco central de la UEM, el elegido ocupará un puesto en el consejo del BCE.
Más acusaciones contra el 'party-banquero'
La dimisión de Welteke al frente del Bundesbank coincide con el lanzamiento de nuevas acusaciones contra el que la prensa sensacionalista alemana llama ya 'el party-banquero'. Según la televisión pública germana, Welteke y su esposa fueron invitados por el grupo automovilístico BMW al premio de Fórmula 1 de Montecarlo en junio del pasado año. La compañía, que como otros grupos automovilísticos gestiona un banco especializado en la financiación de automóviles, ha confirmado la invitación, aunque aclaró que Welteke costeó el vuelo hasta Mónaco. En materia de política monetaria, Welteke y el Gobierno han mantenido discrepancias en los últimos años. El Bundesbank no ha respaldado las demandas del Ejecutivo para que se ponga más énfasis en el crecimiento económico y menos en el control de la inflación. La política monetaria está en manos del BCE desde 1999 y como miembro del consejo de dicha entidad Welteke podía decidir sobre los tipos.