La siderúrgica Celsa sella su reestructuración de 2.000 millones de euros
La compañía refinancia la deuda existente con la aportación de capital y deuda subordinada por sus accionistas y los 1.200 millones de euros obtenidos en bonos
Celsa ya tiene cerrada su reestructuración. La siderúrgica ha comunicado este miércoles que se ha efectuado el desembolso de los 1.200 millones de euros en bonos colocados la semana pasada y que ha recibido las aportaciones en efectivo por parte de los accionistas por 800 millones de euros (600 millones en un crédito subordinado y 200 millones en capital).
La compañía asegura que con este dinero se ha realizado el repago de la totalidad de la deuda del grupo que era objeto de refinanciación, unos 2.000 millones de euros. “Concluye con ello el proceso de reorganización financiera a resultas del cual se ha mejorado las condiciones de coste y plazo de la deuda del grupo”, afirma la empresa que preside Rafael Villaseca en una nota.
La reestructuración se produce después de que la semana pasada concluyera la colocación de los bonos y la junta aprobara la aportación de los actuales propietarios del grupo siderúrgico. Los principales son Atestor, con un 46,6%, y Strategic Value Partners (SPV) con un 34%. En la colocación de los bonos a cinco años participaron Goldman Sachs, Barclays y JP Morgan –los coordinadores globales de la emisión– y de BBVA, BNP Paribas, Citi, Standard Chartered y RBC, que han actuado de bookrunners. Celsa pagará un interés del 8,25% por 750 millones de euros y el euríbor a tres meses más 550 puntos básicos para otros 450 millones.
Sumados el capital y la deuda subordinada de los accionistas (800 millones), y los bonos recién estrenados (1.200 millones), la compañía cuenta con recursos suficientes para refinanciar por completo su pasivo, que asciende a casi 2.000 millones de euros, con unos vencimientos que van desde los poco más de 400 millones previstos para el próximo año hasta los más de 1.000 millones que tenía que devolver en 2028, según el folleto de la emisión. En la refinanciación se ha incluido además una línea de crédito revolving (de libre disposición para proporcionar liquidez en su operativa diaria) por 200 millones de euros, según un documento de la operación al que ha tenido acceso CincoDías.
El pasado junio se conoció que el brazo inversor de La Caixa, el holding Criteria Caixa, descartó entrar en el grupo siderúrgico, tras haber abierto negociaciones que arrancaron a principios de abril, cuando Criteria anunció su intención de tomar el 20% de la compañía mediante una ampliación de capital. Celsa descartó entonces continuar con la búsqueda de un socio.
Celsa, que registró unas ventas de 3.352 millones de euros y un ebitda ajustado de 451 millones de euros en los últimos 12 meses hasta septiembre de 2025, cuenta con 5.232 empleados. De cara al futuro, en una nota, el segundo accionista del grupo, SVP, enumera diversos factores que seguirán fortaleciendo el rendimiento financiero de Celsa. Entre ellos, la propuesta de la Unión Europea para reducir las cuotas de importación de acero en la UE en un 47% y duplicar los aranceles por encima de los niveles de cuota del 25% al 50%, lo que se espera que aumente la utilización por parte de los productores de la UE y tenga un impacto positivo en los márgenes del acero.
SPV señala además las perspectivas positivas para el sector de la construcción en los principales mercados de Celsa. La construcción representa el 85% de las ventas finales de Celsa y se prevé un crecimiento anual del 3,4% en España y del 5,2% en Polonia entre 2024 y 2027.
