Morgan Stanley ofrece 2.160 millones por Canary Wharf
Canary Wharf, promotora inmobiliaria del segundo distrito de negocios de Londres, está en la mira de Morgan Stanley y Goldman Sachs. Los dos bancos de negocios han ofrecido, a través de sus fondos inmobiliarios, 1.500 millones de libras (2.160 millones de euros) por la propietaria del complejo de oficinas situado en los docklands londinenses.
La venta de la empresa se interpreta como una señal de recuperación de un sector, el financiero, que ha perdido 30.000 empleos en los últimos tres años. Actualmente más del 10% del espacio de oficinas de que dispone la inmobiliaria está vacío.
La oferta de los dos bancos de negocio cuenta con el respaldo de Simon Glick, un inversor de Nueva York afincado en Canadá que posee el 14,9% de Canary Wharf. La propuesta se produce tras cinco meses de negociaciones, aunque todavía no supone la victoria del consorcio formado por Morgan y Goldman.
El fundador y presidente de Canary Wharf, Paul Reichmann, que posee el 7% de la compañía, ha mostrado su disposición a presentar una oferta competitiva por la sociedad si el precio era considerado como inadecuado. Reichmann persigue un precio próximo a los 300 peniques por acción, cuando la propuesta del consorcio que se está negociando es de 220 penique, más otra parte en acciones nuevas.
Canary Wharf, en sus orígenes, estaba promovida por Olympia & York, propiedad de Reichmann. Esta empresa suspendió pagos en 1995 pero el proyecto londinense salió adelante a pesar de las dificultades, gracias al apoyo de un grupo de bancos. En 1999 la compañía salió a Bolsa y en marzo pasado volvió a entrar en crisis cuando alertó de un incremento en la tasa de desocupación de sus inmuebles.