Un tribunal de EE UU anula el registro de usuarios contra el telemarketing
Un tribunal federal de Oklahoma ha dejado sin efecto la entrada en vigor el 1 de octubre del registro en el que más de 50 millones de ciudadanos de EE UU se han apuntado para dejar de recibir llamadas de telemarketing. El juez considera que la agencia que lo puso en marcha no tenía la autoridad para hacerlo.
Faltaba una semana para que dejaran de llegar llamadas de empresas de telemarketing y faxes dando a conocer ofertas para vacaciones, tóner barato o seguros. A partir del 1 de octubre, los más de 50 millones de ciudadanos que se habían dado de alta en el registro nacional llamado do not call list dejarían de recibir estas llamadas o las empresas que las realizaran se enfrentarían a multas de 11.000 dólares. Ahora no está tan claro.
El miércoles pasado un juzgado federal de Oklahoma paró todo este engranaje temporalmente al considerar que la Comisión Federal de Comercio (FTC en inglés), que puso en marcha este registro, ha sobrepasado los límites de su autoridad, ya que el Congreso no le ha autorizado para ello. Según el juez, la agencia solo puede prohibir las prácticas abusivas, pero no poner en marcha el registro de filtro de llamadas.
Los 18 millones de dólares recibidos por el Congreso para ello no son considerados por el juez como una autorización explícita, algo que si que tiene, a su entender, otra agencia, la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones).
Rapidez en el Congreso
La popularidad del registro ha presionado al Congreso, donde se trabaja a marchas forzadas para conceder la autoridad explícita que el juez estima pertinente. De hecho, un día después de que se diera a conocer el veredicto la Cámara de Representantes la aprobaba por 412 votos a favor y ocho en contra.
Este proceso tiene que repetirse en el Senado y precisa que el presidente, George Bush, lo ratifique. Y parece que lo hará sin problema, según comentaba el jueves su portavoz, Scott McClellan.
En cualquier caso, la FTC ha recurrido la decisión y pide que se mantenga en suspenso para que el servicio funcione a partir del miércoles como estaba previsto. La Asociación Nacional de Telemarketing ha pedido a sus miembros que, temporalmente, dejen de hacer sus llamadas a los números prohibidos a partir del miércoles.
La decisión del juez de Oklahoma llega después de haber oído a la Asociación de Marketing Directo, que aglutina a las empresas del sector. Según esta asociación, están en peligro dos millones de puestos de trabajo este mismo año si el registro, que comenzó a recibir suscripciones en julio, sigue adelante.
Los temores laborales ya han sido tachados de excesivos por parte del Congreso y los analistas. Además, el registro no filtrará todas las llamadas, aunque si el 80% de ellas, porque podrán seguir haciéndose por parte de encuestadores, organizaciones caritativas y políticos. Así, muchas compañías del sector tratan de especializarse en servicio al consumo.
La asociación, que celebra la última decisión, seguirá su lucha contra el registro en otros tribunales, aduciendo que ataca a la libertad de expresión. Algunos juristas ya han señalado que la libertad de expresión comercial no está sujeta a las mismas garantías.
La Asociación Nacional de Telemarketing ha interpuesto similares demandas en los juzgados de Denver, que se espera tengan un veredicto en los próximos días en la misma línea que el de Oklahoma.