El acuerdo de Argentina con el FMI crea optimismo en las empresas españolas
El difícil y trabajoso acuerdo al que arribaron a última hora del miércoles el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Argentina parece estar generando un nuevo clima de prudente optimismo entre las compañías españolas con inversiones en ese país.
Ayer, el máximo responsable del Santander Central Hispano (SCH) para América Latina, Francisco Luzón, celebró ayer la firma del entendimiento que 'supone la reincorporación de Argentina a la comunidad financiera normal'. Un día antes, en Barcelona, el presidente del banco, Emilio Botín, había pronosticado el acuerdo a pesar del rechazo argentino a efectuar un pago de 2.900 millones de dólares al FMI el pasado martes, día de su vencimiento.
'Santander no se va de Argentina. Yo creo que el país va mejor. Pienso que (el diferendo con el FMI por el acuerdo) se acabará arreglando', dijo Botín en una clara muestra de su confianza en el rumbo de la economía suramericana.
Buena negociación
A pesar de que la carta de intención entre el Fondo y Argentina no contempla compensar a los bancos por las pérdidas sufridas tras la devaluación ni el aumento de tarifas de los servicios públicos privatizados, los inversores españoles creen que esto terminará ocurriendo.
'El Gobierno argentino ha negociado duro y bien. Ha logrado un preacuerdo que no ponga en peligro un crecimiento económico coyuntural que puede llegar este año al 5%', dijo un portavoz de Endesa. Con relación a las tarifas eléctricas, la fuente señaló que el hecho de que el aumento no figure entre los compromisos con el Fondo no debe hacer pensar en que no se producirá.
'El Gobierno ha tratado de guardar un grado de libertad que no significa que tenga intención de no aumentar las tarifas. Nosotros creemos que habrá una redefinición de las mismas antes de diciembre de 2004, según el calendario del plan enviado al Congreso, y confiamos en que las eléctricas serán las primeras en incrementarse', agregó el portavoz.
Si bien no hubo ayer ninguna valoración de este acuerdo por parte de Aguas de Barcelona, su director general, Josep Vila, anunció que la firma ha logrado dos nuevos contratos en Buenos Aires y aseguró que mantendrá la concesión de Aguas Argentinas, en sociedad con Suez Lyonaise des Eaux. Una señal de su decisión de continuar en Argentina.
Ni Telefónica ni el BBVA se manifestaron al respecto, pero fuentes argentinas dijeron que avanzan las negociaciones de la primera con el Gobierno para definir el tema de tarifas.
En la capital argentina, mientras tanto, fuentes oficiales confirmaron que ayer se efectuó el pago de 2.900 millones de dólares al FMI, utilizando reservas del país. El presidente Néstor Kirchner dijo que el acuerdo 'es importante, pero no la panacea' para solucionar los problemas, y anticipó que habrá 'una discusión fuerte' para definir el funcionamiento y las tarifas de las empresas de servicios públicos.