Las petroleras aprovechan el alza del crudo
Las cosas no siempre salen como se esperan. Lejos de descender, el precio del petróleo ha mantenido la senda alcista desde que acabó la guerra de Irak, cuando era precisamente lo contrario lo que esperaban los analistas. Comenzada la contienda, a mediados del mes de marzo, el fin de la incertidumbre motivó un descenso del precio del barril de crudo desde el entorno de los 34 dólares hasta los 25. El petróleo llegó incluso a cotizar por debajo de los 24 dólares momentos antes de que Estados Unidos anunciara el fin de las hostilidades. Pero en ese preciso momento, a comienzos del mes de mayo, y contrariamente a lo que se esperaba, la cotización del crudo reinició la senda alcista hasta el entorno actual de los 30 dólares. Según estiman los analistas, estos niveles podrían mantenerse aún durante algún tiempo, lo cual puede beneficiar a las compañías energéticas y, por extensión, a los fondos que invierten mayoritariamente en ellas.
'El barril de petróleo ha mantenido una cotización en el rango entre los 26 y los 28 dólares, acercándose a la parte alta del nivel preferido por la OPEP la Organización de Países Exportadores de Petróleo', relatan en BNP Paribas. El problema de fondo, que explica que los precios se mantengan en cotas tan elevadas, es que la producción de crudo iraquí está todavía lejos de los niveles previos a la contienda; tanto fue el daño de la guerra sobre las instalaciones del país. Esta misma semana, la Agencia Internacional de la Energía, en su informe mensual, pronosticaba mayores subidas del petróleo a raíz de la incertidumbre sobre la producción en Irak y el bajo nivel de los inventarios en los países desarrollados, condición para un aumento de la demanda de petróleo. La agencia prevé un aumento de la demanda del 10% para lo que queda de año debido sobre todo a la creciente demanda de China. Sin embargo, la OPEP constriñe todavía la producción, temerosa de que una reactivación de la actividad en Irak provoque un descenso demasiado acusado del precio del barril.
Las compañías petroleras se están beneficiando de este contexto. 'La rentabilidad futura del sector depende claramente de la dirección del precio del petróleo', explican en Citigroup. Las más beneficiadas son las compañías con mayor peso de la extracción de crudo en su cuenta de resultados. Sin embargo, la evolución en Bolsa de estas empresas a lo largo de este año no ha reflejado los elevados niveles de precio de barril generados tanto por la guerra de Irak como por la huelga general en Venezuela, uno de los mayores productores del mundo.
'En términos de valoración, el sector tiene un PER veces que el beneficio está incluido en el precio de la acción relativo de 83 veces, lo que supone que se encuentra cerca de los mínimos de los últimos cinco años', explican en Citigroup. El banco de inversión ha elevado su recomendación para el sector de infraponderar a sobreponderar en cartera, teniendo en cuenta las bajas valoraciones en Bolsa, frente a unos niveles elevados del crudo que están generando mucha caja a las compañías.
Los fondos que invierten en compañías energéticas, cerca de una treintena a la venta en España, apenas acumulan rentabilidades desde el mes de enero (los que ganan), aunque sí que han aprovechado el tirón del precio del petróleo de los últimos tres meses para lograr revalorizaciones, vía empresas cotizadas del sector, que en algunos casos superan el 15%.
Muchas gestoras y analistas han revisado al alza sus perspectivas para estas compañías a pesar de que se trata de un sector de corte defensivo y se espera que con la recuperación económica tirarán de los mercados compañías más cíclicas y de crecimiento. 'Estimamos una subida del sector en los próximos seis meses del 13% desde los niveles de cotización actuales', afirman en BNP Paribas. Los analistas del banco francés estiman que los niveles del precio del crudo y los márgenes de las compañías se mantendrán durante este tercer trimestre, aunque matizan que la evolución bursátil de estas compañías dependerá también del sentimiento del mercado en su conjunto.
Citigroup, por su parte, apunta dos razones más por las cuales el sector petrolero podría comportarse bien a lo largo de los próximos meses. Estas compañías, junto con las materias primas y las tecnológicas, se han revalorizado consistentemente en Bolsa en momentos de subida de los tipos de interés de los bonos. En la última escalada de la rentabilidad de la deuda tan sólo estos dos últimos sectores han reaccionado al alza, quedándose rezagadas las petroleras.
'Una última razón para fijarse en los valores energéticos es su tamaño', afirma el banco de inversión estadounidense. 'En nuestro último informe resaltábamos que los mayores valores europeos se habían quedado atrás durante el último rally, y que podrían darse oportunidades. Cinco de las 15 mayores compañías europeas por capitalización bursátil son petroleras. Esperamos que cualquier movimiento que realicen los grandes valores beneficie al sector energético'.