Frente abierto en la CNMV
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tiene abiertos dos frentes importantes en los que se juega de nuevo la confianza de los pequeños inversores: la opa de Hesperia sobre NH Hoteles y la investigación sobre el golpe de mano dado por la familia Entrecanales en Avánzit. Es de esperar que la actuación del órgano regulador satisfaga al mercado, pero experiencias recientes demuestran que la CNMV necesita actuar con más celeridad y transparencia.
Las acciones de Avánzit llevan casi dos semanas sin cotizar por la suspensión ordenada por el regulador. El accionista que legítimamente entró en ese valor está atrapado sin poder liquidar sus títulos, a la espera de que la CNMV autorice la contratación. El mercado reclama siempre liquidez, y en este caso se la niega el propio regulador. Una decisión tan drástica como ésta sin ofrecer explicaciones precisas sobre el desarrollo de la investigación sólo se entendería si la decretara un juez.
La opa de Hesperia, al igual que la gran mayoría de las realizadas en España en los últimos tiempos, es parcial. Y el resultado final de estas ofertas siempre suele ser el mismo. El oferente se hace con un porcentaje suficiente para controlar el consejo de la empresa apetecida y decide una fusión con un canje favorable a sus intereses y abusivo para los pequeños accionistas. Hesperia asegura al regulador que 'no tiene prevista' una fusión y que no subirá el precio de la opa. En Londres esa música suena diferente. ¿Qué dice la CNMV?