Berlusconi, a favor de que Europa aumente el gasto militar
El controvertido primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, se pronunció ayer a favor de que la Unión Europea incremente significativamente su poderío militar para que el bloque tenga un poder mucho más creíble en el escenario mundial.
'Si no tenemos una fuerza militar, no tendremos poder diplomático ni político', dijo Berlusconi ayer a la radio francesa, un día antes de que Italia asumiera la presidencia rotativa de la UE.
La presidencia de Italia en la UE durante el segundo semestre de 2003 estará marcada por el comportamiento de Berlusconi, uno de los más fuertes aliados de Estados Unidos, que se ha enfrentado en los últimos meses a un caudal de críticas por las acusaciones de supuestos actos de corrupción.
'Europa debe ser complementaria a EE UU. Creo que Occidente debe estar unido. No puede haber competencia entre nosotros y América', dijo Berlusconi, quien señaló que la rivalidad es buena en el plano empresarial pero no en la política.
Francia y Alemania tuvieron serias diferencias con EE UU por la guerra en Irak, pero Italia y España fueron firmes defensores de la política estadounidense.
Corrupción personificada
Desde Alemania, la cúpula del Partido Socialdemócrata (SPD) criticó ayer con inusitada franqueza a Berlusconi, al que el número dos del grupo parlamentario, Michael Müller, calificó de 'la corrupción en persona'.
'Berlusconi perjudica a Italia y ahora también a Europa', afirmó Müller en un comunicado difundido con motivo del comienzo de la presidencia italiana UE este martes.
Según Müller, 'el primer ministro italiano desmantela la independencia de los tribunales, confecciona las leyes a su gusto, pone al mismo nivel sus intereses y los del Estado y convierte a los medios de comunicación en sus súbditos'.
En tanto, el Tribunal de Justicia de Milán que intenta procesar a Berlusconi por corrupción dijo ayer que la recién aprobada ley de inmunidad que protege al líder italiano podría ser ilegal, y pidió a la Corte Suprema investigarla. Los jueces dijeron que suspenderían el caso en cumplimiento con la polémica ley de inmunidad aprobada la semana pasada, pero pidieron a la Corte Suprema que revise la ley, pues los temores sobre su inconstitucionalidad no son 'totalmente infundados'.