Los Quince debaten hoy la directiva de opas en un clima de fuerte división
El Consejo de Ministros de la UE celebra hoy un nuevo debate acerca del proyecto de directiva sobre opas, en un clima de fuertes discrepancias en torno a cuál debe ser la profundidad de la norma. La propuesta de la directiva, cuyo borrador inicial se remonta a 1989, tiene por objeto armonizar las reglas de los procedimientos públicos de adquisición en los distintos estados miembros, en aras de aumentar las transparecia de estas operaciones y consolidar la implantación del mercado único.
Una de sus iniciativas de mayor envergadura es la prohibición de que los directivos de las empresas adopten medidas defensivas contra una opa, si no cuentan con el beneplácito previo de la junta de accionistas. Se trata así de defender los derechos del pequeño accionista.
Pero Alemania, secundada por el Reino Unido, ha lanzado una fuerte ofensiva contra esta parte de la directiva y, en las negociaciones previas al Consejo, ha exigido su retirada completa. Los países nórdicos le acompañan al objeto de evitar el impacto de la norma en su regulación de votos múltiples. Enfrente, Francia, España, Portugal, Italia e Irlanda rechazan una directiva de mínimos como la planteada por Berlín y defienden los planes iniciales de la Comisión Europea.
El proyecto de Directiva sobre opa ya recibió un fuerte varapalo en julio de 2001, cuando el Parlamento Europeo rechazó, por empate de votos, el difícil acuerdo al respecto que previamente había fraguado con el Consejo. Por otro lado, el Consejo de Competitividad podría alcanzar un acuerdo político sobre la norma de regulación de promociones de venta y sobre el reglamento de detergentes, y será informado por la presidencia griega sobre los últimos avances en el dossier de la patente comunitaria.