La banca europea atisba un principio de recuperación pese a la caída de beneficios
La mala marcha de las Bolsas y de las divisas latinoamericanas sigue dejando huella en los resultados de la banca europea, pero las entidades empiezan a remontar el bache. El mayor banco del continente, el suizo UBS, ganó 798 millones de euros en el primer trimestre, un 11% menos, por el efecto de la caída del dólar y los menores ingresos en el negocio de clientes de banca privada. Estas cifras echaron por tierra las pesimistas previsiones de los analistas, que esperaban una caída del 25%.
Pero UBS ya ve luz al final del túnel. El presidente del banco, Peter Wuffli, afirmó ayer, en conferencia de prensa, que 'la presión' del entorno bursátil, principal culpable del empeoramiento de resultados, 'podría empezar a aflojarse'. 'Se empieza a ver el final de la crisis de los mercados', añadió. El escenario geopolítico está más claro tras el fin de la guerra en Irak y esto ha ayudado a la entidad a ser 'un poco más optimista', según Wuffli. Por el momento, el gigante suizo no prevé un plan masivo de reducción de empleo.
Mientras, los recortes drásticos de plantilla que realiza el grupo HVB (Hypovereinsbank), segundo banco alemán, no dan todavía frutos. Y ya afectan a 11.100 puestos de trabajo tras anunciar su presidente, Dieter Rampl, una reducción adicional de 2.000 empleos. El HVB presentó ayer pérdidas de 77 millones, frente a los nueve millones de ganancia de marzo de 2002, por las fuertes provisiones para cubrir impagados por quiebras en empresas alemanas, los menores ingresos y los mayores impuestos. Es el tercer trimestre consecutivo en números rojos.
Optimismo en España
No obstante, la entidad también mejoró levemente al lograr un beneficio operativo de 111 millones de euros frente a la pérdida de 92 millones del primer trimestre de 2002. Su rival, Commerzbank, ha salido del túnel, ya que en el primer trimestre ha vuelto a tener ganancias (de tres millones). Su broker online Comdirect entró en beneficios, ganó 2,4 millones frente a las pérdidas de 1,8 millones en marzo de 2002.
En España, los dos grandes bancos, el SCH y el BBVA, también han lanzado un mensaje de optimismo sobre la marcha del ejercicio. Ambos han destacado la mejora registrada en el primer trimestre respecto a los dos anteriores y prevén que se extienda al resto del año. El SCH, que ganó un 8,7% menos (612,5 millones), ha sugerido que en diciembre logrará impulsar el beneficio en torno a un 9%, mientras el BBVA, cuyo resultado cayó un 12,4% (514 millones), estima que éste crecerá un 25% al cierre del ejercicio.
Los bancos italianos desgranaron ayer sus cuentas. El beneficio del número uno, Banca Intesa, cayó un 26,4%, hasta 313 millones, por las mayores provisiones y los menores ingresos por comisiones. Este resultado positivo también rompió las previsiones. El banco espera una 'remontada significativa' de la rentabilidad en próximos trimestres gracias al estricto control de costes que realiza, la receta que está aplicado la banca europea.
Su rival y segundo banco italiano, Unicredito, presentó las mejores cifras: ganó un 5,5% más, hasta 515 millones, gracias a los resultados extraordinarios. Espera ahorrar 720 millones anuales a partir de 2004 con la reorganización de su negocio.
Mientras, Sanpaolo-IMI, tercer banco del país, sorprendió ayer con una clara mejora. El beneficio avanzó un 0,7%, hasta 280 millones, en vez de caer un 20% como calcularon los analistas, por el mejor comportamiento del margen de intermediación y la reducción de provisiones. Prevé eliminar 2.000 empleos en dos años, el 4,4% de su plantilla. Banca Nazionale del Lavoro (BNL), por su parte, ganó un 17,2% menos (77 millones) por las dotaciones. Pero confía en lograr a corto plazo el objetivo de mejorar la rentabilidad del negocio.
El beneficio de la primera aseguradora del país, Generali, cayó un 15% (171 millones) por las abultadas provisiones, de 1.000 millones, si bien la entidad prevé que la mejora de la actividad se amplíe al resto del ejercicio.