_
_
_
_
_
Firma del Tratado

Aznar pide un presidente estable para toda la Unión que 'no sea un hombre de partido'

El presidente del Gobierno español, José María Aznar, reiteró ayer que una de las principales consecuencias que traerá la ampliación de la Unión Europea será la exigencia de cambios institucionales y de funcionamiento de los Veinticinco. En concreto, insistió en su convicción de que el Consejo Europeo necesita un presidente estable y que es 'imposible' que se siga trabajando con el actual sistema de presidencias semestrales.

Dicho esto, el líder del Ejecutivo español se mostró 'abierto' a discutir modalidades de elección para el presidente del Ejecutivo comunitario, pero advirtió a quienes apuestan por una elección a cargo del Parlamento Europeo que éste 'no debe ser un hombre de partido' si se quiere que la Comisión siga siendo lo que es, guardiana de los Tratados y depositaria de la iniciativa legislativa.

En opinión de Aznar, existe un 'riesgo grande', que hay que 'conjurar', de que la Unión, en su afán por llegar a un acuerdo sobre la reforma de la UE, llegue a un 'debilitamiento de las instituciones' y, además, advirtió de que deben mantenerse los equilibrios sobre composición de las instituciones que se alcanzaron en la Cumbre de Niza, en diciembre de 2000.

Abogó también por reforzar los poderes de la Comisión Europea, al menos en materia de Justicia e Interior.

Por último, apostó por mantener el marco institucional común de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y que sea posible, en este ámbito, que los países que lo deseen emprendan cooperaciones reforzadas.

El líder del Ejecutivo se expresó así tras una reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de los 25 con el presidente de la Convención que prepara la futura Constitución europea, Valéry Giscard d'Estaing, que anunció la disposición de todos los dirigentes de crear un puesto de ministro de Exteriores de la UE.

En el terreno político, Aznar dio la bienvenida a los 10 países que ingresaron ayer en la UE y saludó 'la reunificación de Europa en libertad, democracia y prosperidad' superando las 'viejas querellas y divisiones del continente'.

Tras firmar junto a la ministra de Exteriores, Ana Palacio, el Tratado de Adhesión, al igual que sus homólogos de todos los países miembros, Aznar dijo que Europa 'no debe cerrar ahora sus puertas, sino esperar a otros amigos', en referencia a Bulgaria, Rumania o Turquía, 'que siguen el camino que hicieron España, Portugal y Grecia'.

Después de dar esta bienvenida, el líder popular subrayó, una vez más, la necesidad de acometer reformas que mejoren el funcionamiento de la UE 'para ser más eficaces y dar respuesta a las esperanzas y anhelos de los ciudadanos'.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Más información

Archivado En

_
_