æscaron;ltimo intento de Philip Morris para evitar un aval de 12.000 millones
El grupo tabacalero se volvió ayer a ver las caras con el que es ahora mismo uno de los principales riesgos para su supervivencia como empresa: el juez Nicholas Byron.
Sus abogados le pidieron formalmente que reconsidere y reduzca su decisión de imponerle un aval de 12.000 millones de dólares como condición previa a la presentación de un recurso contra la sentencia en la que le multa con 10.100 millones de dólares en concepto de daños punitivos. El juez le acusa haber engañado a los consumidores cuando aseguraba que sus cigarrillos light eran menos perjudiciales para la salud.
El magistrado escuchó ayer los argumentos de Philip Morris y anunció que tomaría una decisión a finales de esta semana.
Philip Morris ha señalado ya que no dispone de 12.000 millones de dólares para la fianza y las agencias de calificación de riesgo han advertido que en el caso de que acuda al mercado para obtenerlos no tendrá más remedio que declararse en suspensión de pagos para defenderse de sus acreedores.
Pretensiones
En sus pretensiones de reducción de la fianza, Philip Morris cuenta con el apoyo de los responsables del Departamento de Justicia de 37 Estados federados, que pidieron ayer al juez Byron que libere a la compañía del pago.
Estos Estados temen que el fabricante de cigarrillos, como ha dejado entrever, no pueda pagar, debido al volumen de la fianza, los 2.600 millones de dólares contemplados en el acuerdo que en 1998 firmó la industria tabacalera con 46 Estados por el que las compañías tabacaleras retribuyen con fuertes sumas de dinero a los Estados firmantes para indemnizarles por las pérdidas económicas causadas por las enfermedades debidas al tabaco.
Estos pagos son muy importantes para la financiación de los Estados federales, más ahora con el recorte de presupuestos con la guerra.
En una breve moción presentada ayer ante el juez Nicholas Byron, los 37 ministros afirmaron que los 'intereses vitales' de sus Estados están amenazados si Philip Morris no paga los 2.600 millones de dólares.
Este dinero, explican, 'ha sido ya incorporado a los presupuestos principalmente para los programas públicos de seguro de enfermedades'.
El acuerdo establece el pago de 246.000 millones de dólares hasta 2025 por parte de la industria tabacalera. Philip Morris se responsabiliza del pago de la mitad de esta suma.